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Los cortes programados de electricidad en la costa del Caribe colombiano continúan hoy a pesar de la intervención de que fue objeto la filial española Electrocaribe, ahora a cargo de la Superintendencia de Servicios Públicos.
Esa dependencia del Estado informó que se esperan resolver los apagones despuíés del primer trimestre de este año por situaciones heredadas de la sucursal del consorcio ibíérico Gas Natural Fenosa, suspendida hace cinco meses por mal servicio a la población.
El superintendente de Servicios Públicos Domiciliarios, Josíé Miguel Mendoza, señaló que los cortes programados se deben a las labores de mantenimiento que se están haciendo actualmente bajo el plan de inversiones que tenía esa compañía.
'La red de distribución con que contaba Electricaribe muestra un alto grado de obsolescencia y hay que hacerle mantenimiento a las subestaciones y transformadores, por eso ocurren las interrupciones programadas', añadió.
Añadió Mendoza que saben que los costeños siguen padeciendo un mal servicio de energía que no está conforme a sus necesidades. 'Por eso transitaremos rápidamente por todas las etapas legales para contratar nuevo operador que haga las inversiones', acotó.
El tema de las deficiencias del servicio elíéctrico de los siete departamentos de la costa Caribe fue abordado este viernes por el presidente Juan Manuel Santos, en una reunión que sostuvo con los gobernadores departamentales de aquella región ribereña.
El Superintendente de los Servicios Públicos explicó que se han tomado todas las decisiones para evitar que la crisis con Electricaribe afecte con intensos apagones a los usuarios de la costa.
'Se ha dispuesto un fondo del equivalente a unos 50 millones de dólares para garantizar la compra de energía que tenía a su cargo Electrocaribe en el mercado del sistema nacional, cifra que seguramente tendremos que aumentar', opinó.
La transnacional peninsular mantiene aún conversaciones con el gobierno español para el pago a Gas Natural Fenosa de los activos dejados en Colombia por Electrocaribe, que exige un cobro de mil millones de euros y con cuya cifra no está de acuerdo Bogotá.
El contencioso de esa empresa española en esta nación andina ha sido objeto de gestiones al más alto nivel en ambos países para buscar una solución negociada sin tirantez, que han incluido el accionar del Rey Felipe VI y del presidente Santos.
