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Casi la tercera parte de los brasileños de más bajos ingresos tienen más de la mitad de sus ganancias comprometidas con el pago de productos financieros, reveló un estudio de la consultoría Serasa Experian.
En esa situación se encuentra un 27 por ciento de los más pobres del país, quienes deben dedicar más de la mitad de sus salarios a pagar tarjetas de críédito, príéstamos consignados o personales, financiamiento del automóvil e inmobiliario, entre otros.
Es una situación difícil, reconoció el director de Serasa Experian, Julio Guedes, al intervenir en un evento en Sao Paulo que reunió a economistas, especialistas y empresas del sector financiero y proveedoras de servicios de recuperación.
Guedes, reseñó la Agencia Brasil, se preguntó cómo puede un individuo en esa situación destinar más de la mitad de su salario solo a productos bancarios y luego cubrir los demás gastos, y señaló que es necesario 'buscar una tasa de interíés más baja para evitar futuros problemas'.
