El sector asegurador teme los efectos de un exceso de normativa en los próximos años
Publicado el 05/01/2008, por Marian Chaparro
La mayor amenaza a la que tendrá que enfrentarse las aseguradoras en los próximos años es el exceso normativo. í‰sta es la principal conclusión que se desprende del estudio Banana Skin 2007 elaborado por PricewaterhouseCoopers (PWC) junto con City of London Think Thank (CSFI), que explica cómo las nuevas normas merman la rentabilidad de la industria, tanto en el ramos de vida como en los de no vida.
La sobreabundancia normativa, según el estudio, oscurece el horizonte del sector porque eleva los costes de las compañías, las distrae de sus objetivos de aumentar la eficiencia de sus negocios y levanta barreras que dificultan la competitividad y la innovación. El análisis, basado en encuestas a 139 aseguradoras repartidas por todo el mundo, pone de relieve cómo el exceso de regulación es una realidad que inquieta a las firmas de todos los mercados del mundo.
En España, el sector asegurador tambiíén se muestra preocupado ante esta avalancha reguladora. En Aviva alertan sobre su incidencia en la innovación. “La reglamentación en sí no es negativa, pero cuando es excesiva afecta a la capacidad del sector de contribuir al crecimiento económico y de diseñar productos innovadoresâ€, explica Constancio Picazo, director corporativo financiero del grupo.
En Axa, en cambio, se muestran más conciliadores con esta realidad. Víctor de Vicente, director de planificación estratíégica de la firma, apunta que, aunque los últimos desarrollos legislativos pueden afectar a la rentabilidad de los grupos más pequeños o con una escasa red de apoyo internacional, el apogeo normativo “repercutirá positivamente en la imagen del sector segurosâ€, explica.
Desde Caser, la aseguradora de las cajas, consideran que el exceso normativo puede convertirse en un freno a medio plazo si las normas no tienen en cuenta la realidad del mercado, la innovación y la estimulación de la competencia, algo que comparten en la patronal Unespa. “Un exceso de regulación penaliza nuestra posición en el mercadoâ€, explica Mirenchu del Valle, secretaria general de la patronal.
Las críticas a las normativas hacen una excepción con la propuesta de directiva europea Solvencia II, pues todas las aseguradoras confían en que mejore la gestión de riesgos del sector. “Es una oportunidad única para crear un marco de supervisión más moderno, armonizado y que favorezca la gestión de riesgos más sofisticadaâ€, dice Picazo, quien aplaude que la norma permita que las multinacionales sean supervisadas sólo por la autoridad del país donde está su sede.
“Solvencia II debería mejorar la solidez financiera de las aseguradoras que operan en Españaâ€, apunta De Vicente. Antonio García, director financiero y de tecnología de Caser, considera positiva la norma “siempre que respete las especificidades del mercado españolâ€.
Terremotos y huracanes
Las catástrofes naturales son la segunda gran amenaza del sector a nivel mundial, sobre todo para las compañías de no vida y reaseguradoras. En España esta cuestión no preocupa a las entidades gracias a la existencia del Consorcio de Compensación de Seguros, que se hace cargo de las indemnizaciones provocadas por estos fenómenos y por el terrorismo. Sin embargo, desde la patronal advierten que, a travíés del reaseguro, las catástrofes mundiales acaban repercutiendo en el sector español.
Los nuevos competidores, como la banca, son otra de las preocupaciones del mundo del seguro.
En Axa reconocen que la bancaseguros ha sabido hacerse un hueco importante en su mercado, especialmente en productos de ahorro. Pese a esto, consideran que el asesoramiento prestado por las aseguradoras es mucho mejor que el que proporcionan los bancos. Desde Caser, en cambio, sostienen que “lejos de ser un peligro, los bancos y cajas contribuyen de forma positiva a la distribución de segurosâ€, apunta García.
Nuevos retos para el sector a la vuelta de la esquina
El año que acaba de empezar se plantea cargado de normas de todo tipo para el sector. Al cierre del próximo ejercicio, las entidades deberán aplicar el nuevo Plan de Contabilidad, que adapta el Plan General de Contabilidad al sector y acerca las normas contables internacionales a las aseguradoras.
En 2008, además, ha entrado en vigor la última parte del Reglamento de la Ley del Seguro de Responsabilidad Civil en la Circulación de vehículos a motor, la relativa a las indemnizaciones máximas de los seguros obligatorios. Esta norma fija el límite máximo de las indemnizaciones por siniestro en 15 millones de euros, por daños materiales, y en 70 millones, en caso de que se trate de daños personales. Según expertos del sector, esta regla podría enfriar la guerra de precios que sufre el ramo de autos, ya que podría obligar a las compañías a aumentar sus tarifas.
Otra de las normas que se abordará este año será la Ley del Contrato del Seguro, aunque, según fuentes del sector, todo parece indicar que se aprobará ya en la próxima legislatura.
La directiva europea del seguro Solvencia II, que establece requerimientos de capital para el sector (similar a la norma de la banca Basilea II), no entrará en vigor hasta comienzos de 2012. Sin embargo, para que se pueda cumplir este plazo será necesario que en los próximos años las compañías del sector y los reguladores colaboren estrechamente para terminar de perfilar el texto. Por eso, desde la Dirección General de Seguros no dejan de pedir a las compañías que participen en los test de impacto de la directiva (conocidos como QIS).