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El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, firmó ayer una orden ejecutiva destinada a fortalecer la seguridad de la jubilación para los empleados de pequeñas empresas.
Mediante la disposición, los departamentos de Trabajo y del Tesoro podrán emitir regulaciones para eliminar los obstáculos normativos que impiden a dichas entidades unirse y formar los llamados planes de retiro por asociación.
Van a agruparse, tendrán mucha fuerza, podrán negociar acuerdos increíbles, comentó Trump en el acto de rúbrica de la iniciativa en Charlotte, Carolina del Norte.
Según James Sherk, asesor presidencial para políticas nacionales, una tercera parte de los trabajadores estadounidenses del sector privado carece de planes de retiro en sus empresas.
Tal problema, precisó a reporteros, resulta especialmente agudo en aquellas con menos de 500 empleados pues la mitad de su personal se enfrenta a la mencionada situación.
A juicio del secretario de Trabajo, Alexander Acosta, la orden de Trump beneficia a los trabajadores de pequeños negocios que buscan formas más fáciles de lograr mayores ahorros para el retiro.
En un artículo para un periódico regional de Carolina del Norte, el titular expuso que las pequeñas empresas norteamericanas crean dos de cada tres empleos nuevos a nivel nacional.
Con tantos estadounidenses laborando para pequeñas empresas, y demasiados sin acceso a planes de jubilación en el lugar de trabajo, estos empleados, en el mejor de los casos, estarán mal preparados para el retiro o, en el peor, sufrirán dificultades reales sin ahorros adecuados, apuntó.
