Berlín
La Federación de Sindicatos Alemanes (DGB) evaluó la ley de salario mínimo para este país de positiva con un balance favorable luego de cuatro años de aplicada.
El miembro de esa junta directiva Stefan Körzell, dijo que las predicciones pesimistas de los empleadores y economistas de que el salario mínimo iba a generar una pérdida de puestos de trabajo no se confirmaron.
Agregó que el salario mínimo instaurado el 1 de diciembre de 2015 redundó en un aumento de sueldo para muchos empleados, impulsó el consumo privado y contribuyó así al auge actual de la economía alemana.
No obstante, es necesario aplicar mejoras, recalcó, en especial porque el salario mínimo no es suficiente para cubrir las necesidades básicas, por lo que debería aumentar a mediano plazo.
Además, se deben aplicar más medidas de control porque aún se observan casos de fraude por parte de las empresas.
A partir de enero de 2019, el salario mínimo bruto en Alemania se incrementó de 8,84 a 9,19 euros la hora. El 1 de enero de 2020 aumentará a 9,35 euros.