La petrolera brasileña Petrobras pretende abrir el próximo año sus primeros puestos de distribución de combustibles en Japón, país en donde ya opera una refinería y a travíés del cual pretende incrementar de manera sustancial sus exportaciones de etanol, informó ayer el diario O Estado de Sao Paulo.
El objetivo de la expansión en Japón es convertir al país en un centro de distribución de etanol para toda Asia y aumentar las exportaciones del combustible derivado de la caña de azúcar desde los 380 millones de litros anuales actuales a unos 12.000 millones de litros en diez años, según portavoces de la petrolera estatal brasileña consultados por el diario paulista.
“Ese es uno de los motivos por los que estamos en Okinawaâ€, aseguró Joao Brandao, director de la refinería Nansei Sekiyu, adquirida por Petrobras en Japón.
Tras adquirir una refinería en la provincia de Okinawa, Petrobras pretende usar puestos propios de distribución de combustible para vender diferentes tipos de derivados del petróleo, incluyendo gasolina con una mezcla de 3 por ciento de etanol, como establece por ahora la legislación nipona.
Pero la meta de Petrobras es aprovechar la política japonesa de aumentar la participación de los biocombustibles en su matriz energíética para crecer en esa economía asiática.
Japón importa actualmente 500 millones de litros por año de etanol, de los que 380 millones proceden de Brasil.
La previsión es que ese consumo llegue a cerca de 12.000 millones de litros al año cuando el país ponga en marcha sus políticas de diversificación de la matriz energíética y de reducción de las emisiones de gases contaminantes.
La estrategia de convertir a Japón en uno de los principales destinos de las exportaciones brasileñas de etanol incluyó la creación hace dos años de la sociedad Brazil-Japan Ethanol, en la que tienen participación Petrobras y la estatal japonesa Nippon Alcohol Hanbai KK.
Petrobras tambiíén tiene en su mira otros mercados asiáticos para la expansión de las ventas de etanol, por lo que Japón puede convertirse en una importante base de distribución en toda la región.
“Petrobas no tenía ningún activo en Asia y desea internacionalizarse. Invertir en Okinawa significa participar en mercados consumidores importantes, como China e India, que están muy próximosâ€, según Brandao.