Roma
El Gobierno italiano respondió a la Comisión Europea su solicitud de información sobre los factores relevantes que motivaron el insuficiente progreso respecto a la reducción de la deuda pública de este país en 2018.
En un documento de 58 páginas, acompañado por una carta del ministro de Economía y Finanzas, Giovanni Tría, Roma expuso sus argumentos con abundante información técnica sobre el contexto macroeconómico, el comportamiento reciente del presupuesto y la deuda y los pronósticos sobre las finanzas públicas.
Aspectos relacionados con el balance estructural, nuevas políticas de inclusión social y la estructura de la deuda, integran también la explicación pedida por la CE como paso previo a la elaboración de un informe sobre este asunto, el cual será sometido a consideración del Comité Económico y Financiero de la Unión Europea.
En la misiva, Tría señaló que aunque las condiciones macroeconómicas le impidieron a Italia cumplir con los 'exigentes requisitos' de la regla regional sobre la reducción de la deuda en 2018, 'el Gobierno siguió un enfoque prudente y responsable'.
Al referirse al Documento Programático de Presupuesto para 2020, el cual deberá ser presentado a la CE en el segundo semestre de este año, el funcionario aseguro que 'el Gobierno está elaborando un programa integral de revisión del gasto corriente comprimido y de los ingresos, incluso no tributarios'.
Ese párrafo sustituyó otro que aparecía en una primera versión de la carta, filtrada a los medios, en la cual se anunciaban eventuales recortes 'del gasto para las nuevas políticas en materia de bienestar social en el período 2020-2022'.
Tal afirmación desató la ira del viceprimer ministro y líder del Movimiento 5 Estrellas, Luigi Di Maio, quien dijo desconocía el contenido de la carta y exigió la rectificación.
