• Los inversores llevan a Parsley Energy ( PE -10.5% ) y Jagged Peak Energy ( JAG -1.5% ) a la leñera después de las noticias de fusión de esta mañana en un acuerdo de acciones valorado en $ 1.62B antes de la deuda.
• El PE, considerado en sí mismo como un objetivo de compra durante algún tiempo, cayó hasta un 14% en las noticias, el último productor de petróleo y gas que sufrió la ira de los inversores que prefieren mayores retornos que la expansión.
• Del mismo modo, Callon Petroleum se desplomó un 16% el 15 de julio después de que la compañía acordó comprar Carrizo Oil & Gas.
• Neal Dingmann de SunTrust Robinson dijo que la fusión fue positiva en general, pero las acciones de PE se verían presionadas por la angustia actual de los inversores contra los acuerdos y las preocupaciones sobre el momento del flujo de caja libre de la compañía, entre otras razones.
• PE trató de disipar algunas preocupaciones, diciendo que espera que el acuerdo de "baja prima" aumente de inmediato al flujo de efectivo por acción en 2020 y anticipó que las mejoras en el flujo de efectivo libre respaldarán un mayor retorno de capital en el futuro.
• De hecho, "baja prima", sin duda, dicen los accionistas de JAG: el acuerdo de PE representa una prima del 11,2% en comparación con el cierre de JAG del 11 de octubre, pero solo un 1,5% por encima del precio promedio ponderado por volumen de 30 días de JAG.
