Las acusaciones de que la vacuna contra el coronavirus de Rusia no es segura carecen de fundamento y están impulsadas por la competencia, dijo el ministro de Salud de Rusia, Mikhail Murashko, a la agencia de noticias Interfax.
El anuncio de ayer está siendo visto por algunos como un golpe de propaganda para el Kremlin, y el nombre de la vacuna, Sputnik V, hace referencia al primer satélite del mundo que fue lanzado por Rusia durante la Guerra Fría.
Los expertos y los funcionarios de salud pública también han expresado su preocupación, dada la falta de datos y ensayos de fase 3, que prueban la seguridad y eficacia de una vacuna en un mayor número de personas en múltiples ubicaciones.
En otras noticias sobre vacunas, Moderna llegó a un acuerdo de 1.500 millones de dólares con la administración Trump para suministrar 100 millones de dosis de su fármaco experimental, llamado mRNA-1273, una vez que sea aprobado.
El gobierno de Estados Unidos también ha llegado a acuerdos similares con Pfizer, Johnson & Johnson, GlaxoSmithKline, Sanofi Novavax y AstraZeneca.