El primer ministro de Italia, Silvio Berlusconi, propuso este jueves que nadie en el mundo esconda el dinero bajo sus colchones como medida efectiva para evitar que la gente se vea afectada por una crisis económica tan profunda como la de 1929.
La magnitud del problema "depende mucho de lo que hagamos, porque si bajáramos la cabeza y dijíéramos basta, estamos en crisis, no consumimos más", advirtió, al tiempo que puntualiazó que "si escondiíéramos el dinero bajo el colchón, habría una crisis profundísima y regresaríamos a 1929".
"Hay gente que incluso dice que no debemos fiarnos de los bancos. Si todos hiciíéramos así...", ironizó Berlusconi en Roma, durante un acto oficial de los "Carabinieri" (Policía militarizada).
El primer ministro de Italia, país que ostenta la presidencia de turno del G8 y que los próximos 13 y 14 de febrero acogerá la reunión de los responsables de Economía del G7 -siete mayores potencias mundiales-, tiene muy clara la solución a la crisis económica internacional: no reducir el consumo.
Berlusconi anima a los funcionarios públicos, cuyo puesto de trabajo no peligra por la crisis, a no cambiar de hábitos de consumo, un mensaje que dirige tambiíén a los ciudadanos de Italia en la medida que cada uno de ellos pueda.
"Sigo lanzando este mensaje a los italianos: no cambies de estilo de vida si puedes", apuntó el mandatario.
"Por supuesto que si uno se ve afectado por un expediente de regulación debe a la fuerza cambiar sus propios hábitos y por este motivo (el Gobierno de Italia) está aumentando los fondos destinados a los expedientes de regulación de empleo", añadió.
El primer ministro italiano cree que el hecho de ser optimista ante una salida de la crisis no significa ser menos realista, ya que tanto las autoridades de Italia como las del resto de países miembros de la Unión Europea (UE) trabajan para afrontar de manera coordinada la actual coyuntura.
Entre los países de la UE "nos hemos dicho que las medidas a tomar deberían haber sido coordinadas entre todos los países de la Unión. Eso estamos haciendo ahora, hay sectores que necesitan una intervención", comentó Berlusconi.
"Otra cosa que estamos haciendo (desde el Gobierno de Italia) es la de ponernos en contacto con los países europeos y sobre todo con Francia para ver si se pueden producir situaciones que no comporten competencia concurrente entre los distintos sectores de los países" miembros de la UE, añadió.
El jefe del Ejecutivo italiano explicó, que antes de la próxima reunión del G20 -el 2 de abril en Londres-, los países europeos integrantes de esa veintena de estados se reunirán el 22 de febrero en Berlín para tratar su posición de cara a la cumbre de la capital británica.
A esa reunión previa, Berlusconi llevará una propuesta propia sobre "una preocupación que es global, la preocupación por los derivados".