'En España tienen que quedar este año cuatro o cinco bancos'
Por Ana Perona en Cinco Días
No le asusta el reto que tiene el sector financiero, inmerso en la peor crisis de su historia, este año. Jorge Sanz, socio fundador de Atlas Capital, afirma que se trata de un momento propicio para aprovechar las oportunidades que surjan en la recomposición del puzle del negocio bancario mundial. Sanz, de 50 años, está habituado a los cambios. Ex agente de cambio y Bolsa y ex directivo de AB Asesores, firma que adquirió Morgan Stanley en 1999, hace cinco años decidió junto a algunos colegas emprender su carrera en solitario con la constitución de una firma independiente. Actualmente, Atlas gestiona ya 109 millones de patrimonio.
¿Cuándo terminará la purga que sufre el sector financiero?
De la misma manera que se está reestructurando el sector financiero internacional, el español no se ha tocado. Esto ha sido consecuencia de la falta de valentía para afrontar los problemas y buscar una solución, pero el segundo semestre será propicio, obligadas las entidades más por las cuentas de resultados y por los problemas internos que por interíés de sus representantes.
¿Cree que va a haber fusiones tanto en cajas como en bancos?
Hay bancos que sus balances no van a poder soportar la crisis derivada del sector constructor e inmobiliario. No síé si van a ser obligados, invitados o por sentido común a unir sus fuerzas para recortar gastos y afrontar el futuro en mejor disposición. En ningún caso esto va a suponer un riesgo para los que tengan sus ahorros en los bancos o para los bonistas. No va a quebrar ningún banco español. En las cajas el problema es más grave porque se han visto muchas veces inmiscuidas en negocios por razones más de índole político que estrictamente financiero o profesional. Además, la solución es peor porque viene de mano de los políticos.
¿Cuántos competidores quedarán en España en el sector financiero?
Este año se van a dar fusiones en cajas. Es muy necesario entre las de Levante y algunas del centro. En los bancos se van a producir uniones y tengo la sensación de que incluso alguna bastante importante. Todo el mundo está hablando de fusiones de bancos de tamaño mediano o pequeño y creo que alguna de las que podemos ver este año puede ser sorprendente. Además sería muy bueno. Esto ya no da para más. En España tienen que quedar cuatro o cinco bancos. ¿Para quíé más? En unos años vendrán los bancos chinos a competir aquí. Es preciso contar unas entidades muy fuertes porque para salir fuera hay que tener músculo financiero.
Pero ¿se van a deteriorar tanto y tan rápido los resultados?
Están ya bastante deterioradas. Los bancos durante los últimos años han ido acumulando unas reservas importantes. Se ha llegado el límite; hay que dar soluciones. No podemos escondernos más de los problemas de Fortis, Deutsche, Lehman… Ahora están los nuestros y hay que afrontarlo. Vamos a asistir al nacimiento y expansión de nuevos jugadores. En nuestro negocio habrá una serie de compañías, como Atlas, que seguirán siendo el motor. En banca privada el 80% estaba en manos de la banca generalista, que ahora tiene esta industria aparcada porque cuentan con tantos problemas en su negocio típico que toda su organización está focalizada a su solución. A nosotros nos ofrece una oportunidad histórica para hacernos un hueco con tamaño en España.
¿Habrá fusiones en más sectores?
En construcción y hoteles. Esto se va a dar en la segunda mitad del año.
Con la actual aversión al riesgo, ¿quíé productos se comercializarán?
Los productos deben ser entendidos por el que los compra y el que los vende. En los últimos años, nadie los entendía. Cada vez se vendían productos más extraños. Ha fallado porque todo el mundo estaba pensando en su cuenta de resultados y en su bonus. Eso ha llevado a no ser razonablemente prudentes. Cómo podemos creer en un producto que durante 20 años nos da una rentabilidad del 10% o del 12%. La magia no existe en el mundo financiero, los atajos tampoco. Hemos vivido todos en una nube. Los mercados nos han puesto en nuestro sitio. Y ha sido una cura de humildad enorme. Se va a volver a la sencillez.
Una de las industrias más dañadas ha sido la de los fondos de inversión, ¿cómo se va a reinventar?
Este año seguirá padeciendo, aunque menos que el pasado, fundamentalmente por el deterioro del valor liquidativo. Los fondos de fondos son los que se han venido a menos y van a ir a menos. Cuando tú inviertes en un fondo de fondos a veces es complicado saber cuál es el subyacente último. Van a tomar auge los fondos de inversión directa. La industria comenzará a recuperarse porque dinero sigue habiendo. Todavía no se ha visto el autíéntico daño del sector inmobiliario. Eso va a propiciar que los próximos años va a estar mucho más de moda invertir en productos financieros que en inmobiliarios.
'El Ibex cerrará el ejercicio en 11.000'
El decepcionante arranque de la Bolsa este año no le han hecho cambiar sus expectativas. 'No cambiamos ni un ápice nuestras previsiones de diciembre', señala. Atlas Capital aventuró que el Ibex 35 cerraría el ejercicio en 11.000 puntos. Sanz reconoce que el sector financiero va a vivir 'tiempos difíciles' en el primer semestre, pero apuesta porque la segunda mitad del año la renta variable se recupere. 'Consideramos que 2010 España volverá a crecer y eso lo van a cotizar los mercados'.
El directivo de Atlas cree que las oportunidades de inversión se encuentran en la renta fija privada, donde se han ampliado los diferenciales (la prima sobre los tipos de interíés que exigen los inversores por contar estos títulos), aunque 'sin hacer locuras'. Explica que mucho del dinero que ahora se encuentra en fondos monetarios, que rentan de media un 3% pero cuyos rendimientos a finales de año van a estar próximos al 2%, saldrá en busca de rentabilidades más atractivas. '¿Dónde va a ir? Pues pasando por la renta fija a la Bolsa, porque se está creando un mundo de oportunidades'.
Sanz se califica de 'optimista' y afirma que, del mismo modo que el deterioro de la actual situación económica ha sido más profundo de lo esperado, tambiíén puede ser igual de violenta e imprevista la recuperación. Añade que la decisión de S&P de recortar el rating de la deuda española, desde triple A hasta AA+, 'es congruente con lo que está sucediendo, pero no dramático. Hemos estado en situaciones similares y saldremos de esta sin duda'.