Los trabajadores de la salud en Francia y Alemania han expresado su preocupación por los efectos secundarios de la inyección Covid-19 de AstraZeneca. Esto amenaza con obstaculizar la campaña de inoculación ya rezagada de la UE, que depende de 300 millones de dosis del gigante farmacéutico del Reino Unido, entre otros.
El personal de un hospital en el suroeste de Francia exigió que se reemplazara la vacuna con inyecciones de Pfizer-BioNTech y Moderna, después de que entre el 50% y el 70% de los trabajadores de salud vacunados experimentaron efectos secundarios.
En un cuerpo de ambulancias en Dortmund, una cuarta parte de las 300 personas vacunadas a fines de la semana pasada con la inyección de AstraZeneca se reportaron enfermas después, informó un periódico local.
AstraZeneca dijo que no ha visto informes de reacciones que no encajen con la evidencia recopilada durante los ensayos clínicos. Mientras tanto, un estudio de laboratorio encontró que Pfizer y BioNTech 'niveles dos tercios más bajos de anticuerpos neutralizantes contra la cepa sudafricana del virus.
