"Nos estamos preparando por si la crisis es peor todavía de lo que dicen"
Por Pilar García de la Granja y Luis Vicente Muñoz en El Economista
Acaba de presentar unos resultados austeros acordes con los tiempos que corren. Aún así, el Banco Popular cierra 2008 con un beneficio superior a los mil millones de euros. íngel Ron es el artífice de la evolución del negocio cuya apuesta se basa en el crecimiento y, por supuesto, con el grifo del críédito abierto. La entrevista con el presidente del Popular será emitida hoy por el Grupo Intereconomía.
¿Están dando críédito porque el Gobierno sospecha que la banca no está siendo flexible?
Nosotros estamos dando críédito. En 2008, en un entorno tan complejo como el que se vive, hemos seguido creciendo en críédito y apoyando a las pymes y a las familias. El 44% del críédito va dirigido a pymes y el 32% a las familias. Con un crecimiento del críédito cercano al 6% no se puede decir que estemos restringiendo el críédito; estamos creciendo más que el PIB nominal del país.
Entonces, ¿por quíé cree que hay esta especie de campaña orquestada que dice que los bancos tienen la culpa de que el dinero no llegue a la gente? ¿Se sienten en el punto de mira?
Siempre viene bien que haya alguien al que echar la culpa en tiempos de crisis. La políémica respecto al críédito tiene muchos matices y es demagógica. En el fondo, la prioridad de los bancos es conceder críédito, algo que no sólo estimula la economía, sino que ayuda a generar beneficios, sobre todo en el sector de la banca comercial, que es el modelo tradicional que tenemos en España.
Son bancos que funcionan a travíés de la intermediación financiera, tomando depósitos y prestando. Si no prestan, no van a conseguir márgenes y, por tanto, no van a generar beneficios. Su aportación a la economía descenderá. Tenemos todo el interíés en prestar. Pero la realidad, no es blanca ni negra. Tiene matices. Todos estamos de acuerdo en que el nivel de endeudamiento de las familias y empresas es muy elevado, y, por tanto, es imprescindible que acometamos un proceso de devolución de la deuda. Eso no es malo en sí mismo. Esto lo que provocaría, dentro de los límites de la normalidad, es que España redujese su tasa de crecimiento por un tiempo. Potenciar el ahorro y mejorar la productividad es lo que tiene que hacer ahora el país, y los bancos deben acomodarse a esa situación.
Ahora estamos en un momento en el que crece la morosidad, porque estamos en recesión, pero existe la idea de que lo peor de la crisis no lo hemos visto todavía, porque sólo son morosos, de momento, los clientes del sector inmobiliario, y no tanto las familias y las pymes, ¿es cierto esto?
En todas las crisis la tasa de morosidad del Popular se ha mantenido alejada de la del sector. Y en esta crisis parece que la cosa no va a ser distinta, con independencia de que estar afectados por casos muy sonados hace unos meses hizo pensar que nuestra tasa se iba a disparar, cuando lo que está haciendo ahora es despegarse de la del sector.
El impacto de la caída del mercado inmobiliario en España es muy fuerte y ahora se ve que afecta por igual a todos los sectores económicos. La tasa de morosidad del sector inmobiliario y el de la construcción puede estar un punto o punto y medio por encima de la economía. Por tanto, no tiene un impacto tan diferencial. A lo que estamos asistiendo es a que la crisis está permeando a todos los sectores y la morosidad es general.
Y en esta situación de permeabilidad de la crisis, ¿quíé tasa de morosidad esperan para este año?
No trabajamos con una previsión de morosidad, pero hemos hecho un supuesto inverso. Podemos soportar una tasa de morosidad muy alta, incluso en una hipótesis descabellada, de que la tasa de morosidad se elevara muy por encima de la tasa de 1992 y nosotros pensamos que sí. Pensamos que en 2010 podemos llegar con un ratio de capital similar al actual, aunque la tasa de la morosidad muy alta.