elmundo.es | Reuters
Madrid | Nueva York.- General Motors recortará este año 10.000 puestos de trabajo de los 63.000 que forman su plantilla en todo el mundo y rebajará hasta un 10% la remuneración del resto.
Los salarios fijos de los ejecutivos serán recortados un 10%, mientras que el resto de personal verá reducidos sus ingresos entre un 3% y un 7%.
La medida se suma al Expediente de Regulación de Empleo temporal que el grupo aplicó en su planta de Figueruelas para reducir su producción este año, instalación donde produce de manera simultánea el Opel Corsa, el derivado comercial Combo y el monovolumen Meriva.
La reestructuración de la plantilla es un requisito impuesto por el Gobierno estadounidense para poder acceder a las ayudas del Estado, que de momento ya suman 14.000 millones de dólares para las tres grandes de Detroit: Ford, General Motors y Chrysler.
De los 10.000 puestos de trabajo suprimidos, 3.400 tendrán lugar en Estados Unidos y la mayoría de los despidos serán anunciados el 1 de mayo. En España, el grupo empleaba en 2007 a 7.255 personas. "Aún no se sabe cómo afectará el recorte en España", afirman fuentes de la compañía.
"Estas acciones difíciles son necesarias ante la severa caída de las ventas de automóviles en todo el mundo y por la necesidad de reestructurar General Motors para su viabilidad a largo plazo", sostiene el comunicado de la empresa.
No obstante, los problemas del grupo vienen de largo, pues a principios de 2008 ofreció la baja voluntaria a decenas de miles de empleados tras perder 38.700 millones de dólares y su hegemonía frente a Toyota.
A principios de esta díécada, General Motors contaba con 44.000 empleados en Estados Unidos, una cifra muy superior a los 26.000 que tendría tras los despidos de este año. Por su parte, la suma de los despidos de General Motors, Ford y Chrysler desde 2005 han afectado a más de 140.000 personas
