Los bancos de Amíérica Latina han lidiado con la tormenta que tumbó a muchos gigantes globales, pero la desaceleración del crecimiento económico en la región y un incremento en las tasas de morosidad recortarán sus ganancias en el 2009.
Los analistas esperan caídas de ganancias en los meses por venir en los bancos de las dos mayores economías de la región (Brasil y Míéxico), pero esperan que sigan en números negros y eviten los temores a que colapse la industria que acechan en los países ricos.
En Míéxico, los bancos han hecho más reservas para lidiar con los crecientes príéstamos vencidos y morosidades, en particular en tarjetas de críédito. En Brasil, las tasas de morosidades en príéstamos personales alcanzaron en diciembre un máximo de más de seis años.
“A esta altura del juego no vemos los riesgos sistíémicos que hemos visto en el mundo desarrollado o en los mercados en desarrollo en Europa del Esteâ€, comentó Peter Shaw, director administrativo para instituciones de Amíérica Latina de la agencia de calificaciones crediticias Fitch Ratings. Sin embargo, afirmó que se observa presión por los resultados y en el crecimiento de los bancos en la región.
PIERDEN TERRENO
La crisis crediticia ha forzado a bancos como Citigroup , Bank of America , UBS AG y Royal Bank of Scotland a despedir a miles de empleados y recibir ayudas estatales por miles de millones de dólares debido a las amortizaciones.
Goldman Sachs y JPMorgan recortaron sus metas de utilidades de este año para los bancos brasileños debido a las provisiones para deuda vencida y a una desaceleración en la economía nacional.
Morgan Stanley dijo en un reporte de enero que el 2009 podría ser el peor año en una díécada para las ganancias bancarias en el país ya que caen los márgenes.
En Míéxico, Fitch indicó que las prestamistas conocidas como Sofom y Sofol, que se dedican a hipotecas y otros críéditos de consumo, son las más vulnerables a la escasez de liquidez y a los altos costos para pedir príéstamos. La economía mexicana habría de achicarse más de un 1% este año como consecuencia de la menor demanda estadounidense de exportación de manufacturas.
Bradesco, el segundo mayor banco privado de Brasil, reportó un hundimiento de un 26,5% en sus ganancias del cuarto trimestre, mientras que Banorte , el quinto mayor de Míéxico, anotó una disminución de un 24% interanual en las utilidades del período.
*SIN EMBARGO, RELATIVAMENTE SALUDABLES *
“Los bancos en Brasil específicamente han estado particularmente fuertes. En particular esto se debe a que no estaban apalancados como los europeos o estadounidensesâ€, comentó Stephen Dover, presidente financiero a cargo de administrar activos locales de Franklin Templeton Advisors.
Las acciones de los brasileños Itaú y Bradesco se han hundido un 37% y un 42% desde que alcanzaron máximos ríécord en mayo último debido a que los inversionistas se deshicieron de títulos financieros en todo el mundo.
Los papeles del mexicano Banorte, el único de los grandes bancos del país que cotiza en bolsa, se desplomaron un 60% en el mismo período.
De todas maneras, con capitalizaciones de mercado rondando los 33.000 y los 30.000 millones de dólares, cada uno de los dos mayores bancos privados de Brasil están mejor valuados que Citigroup, la aseguradora holandesa ING Groep , el alemán Deutsche Bank o los británicos Barclays y RBS.
Los bancos de Amíérica Latina han lidiado con las devaluaciones monetarias y la hiperinflación en las díécadas del 1980 y el 1990, con lo que son más cautelosas que las firmas en Estados Unidos y Europa.