Natasha Mascarenhas
Las nuevas empresas tecnológicas en etapa avanzada se enfrentan a un entorno de mercado público cambiante, pero sus contrapartes en etapa inicial se encuentran en un mundo completamente diferente. La cohorte ha tenido acceso a un amplio capital en los últimos trimestres, dándoles una burbuja de capital de riesgo que los protege de alguna manera de los rápidos cambios en la economía en general.
Si bien la burbuja no explota, cambia de forma.
Es posible que no veamos que las nuevas empresas en etapa inicial pasen por rondas agresivas de despidos o experimenten recortes rápidos en las valoraciones debido a las condiciones cambiantes del mercado, pero hay una señal diferente que vale la pena seguir: los pivotes.
Los pivotes, un cambio en la estrategia comercial basado en una nueva perspectiva o tendencia del mercado, son algo inevitables para las empresas jóvenes que aún buscan un producto adecuado para el mercado. Yo diría que es más importante realizar un seguimiento de los pivotes que de las recaudaciones de fondos, porque brindan una instantánea de una startup que reacciona a las nuevas tensiones en el mercado.
Además, a diferencia de las rondas de financiación, un pivote es una señal definitiva de que algo está cambiando, una tensión distinta de un cuadro de inversores que afirma que un fundador está en algo grande.
Tras las conversaciones con varios inversores y fundadores, está claro que las próximas semanas y meses incluirán muchos cambios sutiles en la forma en que las empresas emergentes en etapa inicial hacen negocios. Algunos pueden volver a priorizar los objetivos para reducir el riesgo, mientras que otros pueden buscar nuevos modelos comerciales a más corto plazo para finalmente obtener algunos ingresos.
