La inflación alimentaria no va a desaparecer... eso es un problema.
El aumento de los precios de los alimentos, la energía y otros artículos esenciales para el hogar puede no ser tan fugaz como esperan los economistas o los responsables de la formulación de políticas de la Fed. Eso trae una serie de riesgos, desde una inflación galopante hasta el malestar social.