Los contratos de permutas financieras (“swapsâ€) a cinco años sobre riesgo crediticio vinculados a los bonos de Míéxico y utilizados para cubrirse de eventuales píérdidas cotizaban a 4,19 puntos porcentuales ayer, frente a 3,94 puntos para Brasil, según datos compilados por Bloomberg. La brecha se amplió a un ríécord de 0,43 puntos porcentuales el 17 de febrero, revirtiendo una tendencia de siete años cuando el coste de protegerse contra un impago en Brasil era más alto.
Los bonos mexicanos son este año los de peor rendimiento de Latinoamíérica despuíés de que las muertes relacionadas con el tráfico de drogas aumentó a 5.300 en 2008, el peso se desplomó un 32 por ciento en seis meses y se profundizó la recesión en Estados Unidos, el comprador del 80 por ciento de las exportaciones del país. En Brasil, que depende de Estados Unidos para el 14 por ciento de sus ventas al exterior, el índice bursátil Bovespa está un 5,8 por ciento más alto este año, comparado con un descenso del 16,5 por ciento del índice Bolsa de Míéxico.
“El número de muertos es bastante espeluznanteâ€, dijo Michael Atkin, que ayuda a gestionar US$12.000 millones en activos de renta fija como responsable de análisis soberano en Putnam Investments en Boston. “Míéxico está mucho más integrado con Estados Unidos. Brasil es más capaz de sobrevivir a la crisis económicaâ€.
Las rentabilidades de los bonos en dólares de Míéxico, cupón 6,75 por ciento y vencimiento 2034, son más altas que las de los bonos brasileños de vencimiento similar, aun cuando la deuda mexicana tiene una calificación crediticia superior. Los bonos de Míéxico daban una rentabilidad del 7,55 por ciento, 10 puntos básicos más que la rentabilidad de la deuda brasileña.
Sin vender
Los bonos mexicanos en dólares perdieron de media un 4,8 por ciento desde el 31 de diciembre, la mayor caída de la región, según Merrill Lynch & Co. La deuda tiene la calificación de Baa1 por Moody´s Investors Service y BBB+ por Standard & Poor´s. La de Brasil es tres niveles más baja por Moody´s y dos, tambiíén más baja, por S&P.
Asegurar US$10 millones en deuda mexicana con contratos de permutas sobre riesgo crediticio cuesta US$419.000, frente a US$394.000 para Brasil.
La brecha podría seguir creciendo, dice Edwin Gutiíérrez, que gestiona US$5.000 millones en deuda de mercados emergentes en Aberdeen Asset Management Plc en Londres.
Los inversores sabotearon la prevista venta de Míéxico de bonos a 21 años el 11 de febrero, la primera vez que una díébil demanda obligó a un país latinoamericano a cancelar parte de la oferta de deuda desde que Uruguay lo hiciera en 2005, según Royal Bank of Scotland.
Brasil tuvo un díéficit presupuestario equivalente al 3,1 por ciento del Producto Interno Bruto de los últimos seis años. Míéxico, la segunda mayor economía de Amíérica Latina despuíés de Brasil, declaró un díéficit del 0,2 por ciento.
