El primer ministro sueco, Frederik Reinfeldt, ha descartado ayudas inmediatas de su Gobierno para la insolvente compañía de automóviles Saab, tal y como ha pedido la casa matriz General Motors.
En una entrevista con la agencia sueca TT, Reinfeldt subrayó hoy que el Estado sueco "no participará activamente en el proceso actual, mientras no estíé claro quien adquiere Saab".
Despuíés de que Saab anunciara su insolvencia el viernes, General Motors anunció que estaría dispuesta a ayudar económicamente a mantener la producción de la compañía si el Gobierno sueco participa en los costes.