En la semana que comienza los mercados financieros continuarán nerviosos ante el tema de la crisis bancaria internacional, ya que hay consenso en que mientras no se resuelva la crítica situación de íéstos, no se logrará avanzar en la recuperación de la economía. Tendrá que haber más temprano que tarde una definición clara sobre los pasos a seguir que hagan viables a los principales bancos de Estados Unidos y del mundo.
En menor medida los indicadores de la economía serán un factor que intervenga en los mercados, los datos más relevantes serán la presentación de Ben Bernanke ante el Congreso, los pedidos de bienes duraderos, la venta de casas nuevas, la primera revisión del PIB al cuarto trimestre, y la actividad fabril en el área de Chicago. Sin embargo, en realidad no existe optimismo respecto a las cifras de la economía y, por tanto, no se prevíén sorpresas.
Todo lo anterior se traduce en mercados nerviosos, con posturas precavidas, a la defensiva, en busca de algún catalizador. Sólo reacciones tíécnicas por precios castigados provocarían reacciones ascendentes.
Respecto a las bolsas, sus principales índices se encuentran en niveles límite, esto es, muy cerca de sus mínimos del año pasado, que eran los puntos más bajos desde que comenzó el actual ciclo bajista en noviembre de 2007. Esto significa prácticamente que se confirma la vigencia de las tendencias de baja de largo plazo.
Notas relevantes
La Casa Blanca aseveró el viernes que no favorece la nacionalización de bancos estadounidenses como una opción para estabilizar al alicaído sector financiero y rescatar a la economía mundial de una profunda recesión.
"Díéjenme ser lo más claro posible sobre los bancos. Esta administración sigue creyendo firmemente que un sistema bancario privado es el mejor modo de seguir adelante, asegurándose que están siendo correctamente regulados por este gobierno", explicó el portavoz de la Casa Blanca, Robert Gibbs.
Posteriormente, el Departamento del Tesoro apuntó que hay muchos rumores en el mercado que no deberían ser tomados como una indicación de la política de este gobierno.
"Como ha dicho el secretario Timothy Geithner, preservaremos un sistema financiero que estíé en manos y que sea administrado por el sector privado", abundó en un comunicado.
En tanto, Paul Volcker, uno de los principales asesores económicos del presidente estadounidense, admitió que la economía mundial se estaría deteriorando más rápido que durante la Gran Depresión.
Las acciones de Citigroup, Bank of America y Wells Fargo se hundieron luego de que el senador demócrata Christopher Dodd dijo que algunos bancos tendrían que ser nacionalizados al menos por breve periodo.
Empero, las acciones bancarias borraron parte de sus píérdidas tras las declaraciones de la Casa Blanca, pero los títulos de Citigroup cayeron a 1.95 dólares, la primera vez que cierran a menos de dos dólares desde enero de 1991.
Se espera que el gobierno de Barack Obama revele más detalles de su plan de rescate bancario esta semana.
En el frente económico, un informe del gobierno mostró que la inflación anual en la Unión Americana se esfumó por primera vez en más de medio siglo, luego que la recesión y el descenso pronunciado en los precios de la energía ocasionaran un rápido cambio en las presiones sobre los precios.
Podría extenderse la volatilidad en los mercados
En la jornada de hoy, los mercados estarán sujetos todavía a fuerte tensión, de no aclararse el panorama en torno al futuro de los bancos en Estados Unidos.
En lo interno, el tipo de cambio spot podría respetar la barrera de 15.0 unidades, pero a cambio de mantener elevadas las tasas de interíés internas, sobre todo en la parte larga de la curva de rendimientos