Según los analistas, los bancos centrales de China, Rusia y Turquía fueron los principales compradores del metal precioso en 2022.
Los bancos centrales están comprando oro a un ritmo que no se veía desde 1967 y los analistas señalan a China y Rusia como los principales compradores, lo que indica que algunos países tienen intención de diversificar sus reservas y alejarse del dólar.