La compañía complica aún más su maltrecho aspecto técnico y parece muy probable que podría continuar desangrándose en las próximas jornadas. Hay que recordar que se ha dejado un 45% en los últimos tres meses. Así, para las próximas semanas no descartamos un desplome hasta los mínimos históricos dibujados en las inmediaciones de los 0,05 euros en 2014.