Estados Unidos se quedará sin participar en la Exposición Universal de Shanghai 2010 si la organización privada encargada de sacar adelante su pabellón nacional no consigue reunir 60 millones de dólares (47,5 millones de euros) para el próximo 15 de abril.
Según confirmó a Efe Ellen Eliasoph, directora y copresidente de Shanghai Expo 2010 -una compañía privada y sin ánimo de lucro respaldada por el Departamento de Estado para poner en marcha el pabellón estadounidense-, estos 60 millones de dólares son el coste total del proyecto, que tendrá que ser financiado con capital privado y de gobiernos locales.
Estados Unidos es el único país del mundo cuya legislación prohíbe explícitamente, desde 1993, que el Gobierno central destine dinero a una Exposición Universal, lo que pone a la primera economía mundial en riesgo de quedarse fuera de la Expo por falta de fondos, coincidiendo con la crisis financiera.
La firma de Eliasoph está conversando con cerca de 25 grandes compañías estadounidenses, algunas de las cuales ya se han comprometido a aportar fondos para el proyecto, y cuenta con el respaldo en firme de estados como California, Nevada, Massachusetts y Texas.
Shanghai Expo 2010 ya tiene planificado el pabellón, que será, si sale adelante, de construcción propia, ocupará 6.000 metros cuadrados y presentará cómo sería una ciudad estadounidense en 2030, tras aplicar las conclusiones de desarrollo urbano sostenible de la Expo de 2010, cuyo lema será “Una ciudad mejor, una vida mejorâ€.
Sin embargo, para ponerlo en marcha, los 60 millones de dólares deben estar garantizados antes del 15 de abril, fecha límite que tiene la compañía para presentar el proyecto ante el Gobierno estadounidense y que Washington pueda, a su vez, firmar el contrato de participación con el Comitíé Organizador de la Expo. El contrato, a su vez, debe estar rubricado, como muy tarde, el próximo 30 de abril, víspera de la última fecha oficial posible para iniciar las obras, exactamente un año antes del 1 de mayo de 2010, cuando la Expo abrirá sus puertas.
Desde 1993, EEUU se ha perdido todas las Exposiciones salvo Lisboa (1998) y Aichi (Japón, 2005), donde su presencia fue financiada sobre todo por Toyota North America, dado que el gigante nipón del automóvil tiene su sede en Nagoya, la ciudad anfitriona.
La primera potencia económica mundial ha estado ausente, por insuficiente patrocinio, de la Expo Universal de Hannover (Alemania, 2000) y de la Expo Internacional de Zaragoza (España, 2008), “pero China es tan importante que EEUU tendría que hacer todo lo posible para encontrar una manera de estar allíâ€, destacó Eliasoph.
Estados Unidos está en una “posición difícilâ€, pero financiar el pabellón “todavía es posibleâ€, aseguró, ya que muchas empresas no comprendieron el valor de la Expo hasta pasados los Juegos Olímpicos del año pasado, y ahora están haciendo propuestas “serias†de financiación.
“Es importante estar ahí, porque todo el mundo va a estar ahí tambiíénâ€, concluyó.