El multimillonario Frank McCourt forma parte de un grupo interesado en comprar TikTok para crear una nueva plataforma donde los usuarios puedan controlar sus datos.
Su oferta ha despertado el interés de inversores privados, fondos de pensiones, organizaciones filantrópicas y padres cuyos hijos murieron como resultado de interacciones en las redes sociales.
La empresa matriz de TikTok, ByteDance, ha dicho repetidamente que no venderá la aplicación y presentó una demanda para bloquear la ley que le exige deshacerse de la aplicación de vídeo viral.