La economía de Latinoamíérica se hunde y hace saltar las alarmas en Santander y BBVA
Seguramente, la banca puramente nacional será la que peor lo pase en esta crisis, pero los dos grandes no están ni mucho menos a salvo. Su fuerte exposición a Latinoamíérica, de la que presumían hasta ahora como forma de mantener el crecimiento en medio de la crisis, se va a volver en su contra de inmediato, si hacemos caso a los expertos. Hace unas semanas era Standard & Poor's el que alertaba del riesgo del deterioro de la economía en Míéxico y Brasil, y ahora Morgan Stanley va más lejos con una previsiones aterradoras para estos países.
El analista de esta firma Gray Newman ha rebajado sus previsiones de una recesión moderada del 0,5% para el conjunto de la región este año hasta un derrumbe del 4,3%, la mayor caída desde 1983 (es decir, peor que ninguna de las numerosas crisis que ha sufrido Latinoamíérica desde entonces). ·Llevamos sólo dos meses y medio del año y está claro que la magnitud de la caída es mucho más pronunciada de lo que se temían los pronósticos más pesimistas. Nosotros estábamos entre esos pesimistas -con una previsión de una contracción en Míéxico y crecimiento cero en Brasil-, pero tambiíén nos hemos quedado cortos·, reconoce.
¿Quíé le ha hecho empeorar tanto sus expectativas? Pues que Míéxico se contrajo más del 10% en el cuarto trimestre respecto al tercero en tíérminos anualizados (como se mide el PIB en casi todos los países menos España), contracción que alcanzó un impresionante 14% en el caso de Brasil. Pero el grueso de su nueva previsión no se deriva de lo que ha ocurrido, sino de que lo peor está por venir: no prevíé ningún atisbo de recuperación ni en 2009 ni en la mayor parte de 2010. Morgan Stanley recuerda que las contracciones en Latinoamíérica suelen ser ·violentas, despiadadas y rápidas·, mientras que la recuperación suele medirse en años, no meses.
Respecto a Brasil, donde se concentra la exposición latinoamericana del banco de Emilio Botín, su nueva previsión es de una contracción del 4,5% en 2009, la mayor en 61 años. Además, espera un incremento del díéficit público y que la divisa (el real) continúe debilitándose, aunque sin una devaluación masiva. La parte positiva es que, si la producción se contrae, la inflación caerá por debajo del objetivo del banco central y íéste podrá rebajar sus tipos 550 puntos básicos, hasta el 8,25%.
Frente a este escenario apocalíptico, varios miembros del Ejecutivo de Lula Da Silva aseguraron ayer en Nueva York que la economía volverá al crecimiento en el primer trimestre y que no es probable que entre en recesión este año. Asimismo, señalaron que su Gobierno tiene margen de maniobra fiscal suficiente para adoptar las políticas necesarias de estímulo.
Míéxico, todavía peor que Brasil
En cuanto a Míéxico, las cosas pintan todavía peor. Newman afirma que ·si miramos al deterioro de la producción industrial, el empleo, la confianza y las ventas minoristas, la recesión actual ya eclipsa en magnitud a la de 2001 y, en algunos casos, se aproxima a las caídas secuenciales que se vieron en la crisis 'Tequila' de 1995·. De ahí que pronostique una recesión del 5% frente al 1,5% estimado previamente, ya que la contracción de EEUU ya ha creado una enorme crisis en el sector exportador mexicano, ·y las condiciones se van a poner mucho peor·.
En este caso, la parte positiva es que los díéficit presupuestario y exterior no se dispararán hasta hacerse inmanejables, lo cual debería provocar que el peso se recupere desde los niveles de ·máximo estríés· a los que se ha hundido recientemente. El panorama de la región se completa con recesiones del 4,7% en Argentina, del 1,4% en Chile, del 1,6% en Colombia y del 4% en Venezuela, siempre según Morgan Stanley.
El negocio bancario, amenazado
El propio presidente de la CECA, Juan Ramón Quintás, dijo ayer en su comparecencia en el Congreso que ·si Latinoamíérica escapa a la crisis de EEUU, sería la excepción histórica·. Por eso, espera un fuerte impacto en el negocio bancario, que se traducirá en ·un crecimiento significativo de la morosidad, así como del riesgo país y del riesgo de cambio·. Estas palabras pretendían mandar un 'recado' a Santander y BBVA, como se evidenció cuando Quintás dijo que ·la exposición de las cajas a la región es cero·, olvidando que La Caixa tiene el 20% del mexicano Inbursa (controlado por la familia Slim).
En todo caso, Botín y Francisco González no sólo afrontan un futuro muy complicado en España por el estallido de la crisis inmobiliaria, sino tambiíén en Latinoamíérica, donde el primero obtiene el 32% del beneficio y el segundo, el 53%. No hay más que recordar lo mal que lo pasaron en la anterior crisis de la región, en 2002, con un durísimo castigo en bolsa para ambos bancos. Aunque ahora no vaya a haber un corralito como el de entonces en Argentina y aunque su cotización acumula ya un desplome brutal desde máximos, ahora la exposición de ambos a la zona es mucho mayor. Y Morgan Stanley prevíé una recesión mucho peor que aquíélla.
(Cotizalia)