Por Miguel Navarro. Uno de los temas más delicados que los encargados de las negociaciones deben tratar es el da propiedad intelectual, específicamente el de las patentes de las medicinas.
Según lo expresado por el ex negociador del Gobierno Colombiano para el TLC con EE.UU., Luis Guillermo Restrepo, las farmacíéuticas multinacionales europeas están ejerciendo una fuerte presión para que se incluyan cláusulas que permitan extender los plazos de protección de sus patentes dentro del tratado, lo que perjudicaría a la industria farmacíéutica de los países de la Comunidad Andina (CAN), y finalmente al consumidor.
Existen dos sistemas de protección intelectual que los europeos plantean, uno es a travíés de las patentes, que actualmente funcionan por un plazo de 20 años, pero la UE plantea que se extiendan hasta los 25 años a travíés de certificados de exclusividad.
El segundo sistema, detalló Restrepo, sería bajo el formato de datos de prueba, que en este momento funcionan por 5 años, sin embargo, la UE quiere que se amplíe a 10 años, además de una protección a nueva información que aparezca en el camino, y que prácticamente limite la investigación por parte de los laboratorios de los países andinos, aseguró el ex negociador colombiano.
Además señaló que esta situación es incluso peor a la que ocurrió en la negociación con EE.UU., quien inicialmente no obligaba a la aceptación de estas exclusividades.
“En el TLC con EE.UU. estos puntos que pide la UE no eran obligatorios, aunque finalmente se tuvo que ceder por la desesperación de Perú y Colombia para la firma del TLC ya que se acercaba la salida de la administración Bush, lo que podría retrasar la firma de ese tratado†señaló.
Restrepo tambiíén fue claro en señalar que la Organización Mundial de la Salud (OMS) planteó una estrategia en materia de propiedad intelectual y seguridad pública que reivindica el hecho de tratar a la salud bajo la dimensión que tiene en la vida de las personas y no sobreponer ningún tipo de interíés ante ella.
Bajo este punto, Restrepo señaló que el radio de maniobra de la CAN es muy reducida y, a lo máximo que podemos esperar, es que no se nos impongan más exclusividades.
Restrepo se encuentra en el Perú para participar en un evento paralelo a la segunda ronda de negociaciones para la firma del tratado de libre comercio entre la Comunidad Andina (CAN) y la Unión Europea .
ASPECTOS POSITIVOS
Como no todo puede ser malo, Restrepo tambiíén destacó algunos puntos que deben ser reconocidos dentro de este acuerdo.
Entre ellos habría que mencionar la apertura comercial que traerá el acuerdo. “Una apertura a nuevos mercados siempre es positiva, sobre todo en una íépoca tan difícil como la que vivimos ahora, todos queremos llevar nuestros productos a Europa y seguramente eso se logre.
Otro aspecto a destacar es haber logrado negociar entre comunidades de países y no individualmente. “Siempre es mejor negociar con grupos y no solo con países por más poderosos que seanâ€.
Restrepo tambiíén señaló que otro punto importante es la apertura política, pues a partir de ahora, Europa ya reconoce la importancia de la CAN, y nos serviría para tener algún tipo de peso dentro de futuras negociadores.
Finalmente, Restrepo reiteró que su posición no es radical en contra del TLC con la UE, y señaló que las jornadas en las que participa no buscan aislar a la CAN de la apertura comercial, sin embargo, no podemos continuar haciendo concesiones que podrían afectar a nuestros el futuro de nuestros pueblos.