El oro cada vez brilla más y apunta hacia el 1.000... con permiso de la inflación
La crisis no sólo no ha podido con el metal precioso, sino que íéste no ha dejado de subir pese a los problemas. Es lo que tiene ser el activo refugio por excelencia. Tras las históricas turbulencias que vienen sacudiendo los mercados financieros desde 2007, pocos activos -por no decir ninguno- pueden presumir de transitar por su noveno año consecutivo de ascensos. La excepción que confirma la regla bajista imperante ha sido el oro, que no ha dejado de subir desde que comenzó 2001.