Elmuindo.es/Javier Oms | Barcelona
Actualizado martes 21/04/2009 17:38 horasDisminuye el tamaño del texto Aumenta el tamaño del texto
La fábrica de Seat en Martorell (Barcelona) será la que finalmente se haga cargo del nuevo modelo de Audi, bautizado como Q3, y que garantiza la superviviencia de 1.500 puestos de trabajo en la planta barcelonesa que peligraban por la crisis que azota a todo el sector de la automoción.
Tal y como han confirmado fuentes de Comisiones Obreras (CC.OO), Audi habría anunciado ya a travíés de un correo interno entre sus trabajadores alemanes que la factoría de Martorell se responsabilizará del nuevo modelo. Una decisión sobre la que ha pesado, según queda recogido en el mencionado texto, la "productividad" de la planta catalana, así como la "calidad" de los vehículos que se han venido confiando a su plantilla.
Para lograr esta adjudicación se han tenido que superar varios obstáculos, entre ellos uno que logró enfrentar a los sindicatos: un referíéndum por el que se aprobó la congelación de salarios de la plantilla durante un año, exigencia 'sine qua non' impuesta por la dirección de Volkswagen.
Dicha medida, sin embargo, por momentos pareció insuficiente a ojos de la dirección de la empresa, que alargó más de lo esperado la adjudicación del nuevo modelo. Una dilación que alentó los esfuerzos de los ejecutivos central y catalán, cuyos titulares de industria, Miguel Sebastián y Josep Huguet, viajaron la semana pasada hasta Alemania para forzar la decisión de la automovilística.
No obstante, el impulso que ha llevado a Martorell a erigirse por encima de las plantas con las que competía, situadas en Eslovaquia y Alemania, parece tener forma de subvención. Exactamanete, 100 millones de euros que el Gobierno español ha adjudicado a VW en el marco de las ayudas al sector de la automoción.
