Algunos científicos del 'Center for Computational and Engineering' de la Universidad de California previeron posibles terremotos que podrían ocurrir entre el 2000 y 2010, a partir de movimientos de intensidad superior a 5 grados de la escala Ritchter, cuya localización del epicentro fue en el Oceano Indico; el mapa fue presentado en la reunión de 'American Geophysical Union' un mes antes del fatal acontecimiento del 2004 cuando el Tsunami en Asia alcanzó 9 grados en la escala de Ritchter.
Con el Tsunami de Asia, fueron afectados directamente 11 países y 60 de manera indirecta, creando inundaciones en países distantes como en Colombia, Venezuela, Brasil y Estados Unidos (California); más de cinco millones de damnificados, la mayoría del Sudeste Asiático y Africano, alrededor de ocho mil turistas de países ricos muchos de ellos haciendo a bajo costo; casi dos cientos mil muertos y desaparecidos por el impacto y un número equivalente por epidemias consecuentes (malaria, tuberculosis, encefalitis, desnutrición); un ecosistema alterado con playas erosionadas, suelos cultivables que quedaron salinizados, aguas potables contaminadas por acción química, como el cáncer producido por Mercurio, o demencia por el Plomo; además contaminación por materias fecales, bacterias, moho, virus y por si fuera poco, secuestro, tráfico de menores y depredación sexual
Según Ken Hudnut, geofísico del Instituto Geológico norteamericano, algunas imágenes de satíélite ya han mostrado que el movimiento telúrico causó un desplazamiento de las islas Nicobar y Simeulue.
El movimiento que causó la marejada hizo vibrar la Tierra como si fuera una campana, desplazó posiblemente de manera lateral islas pequeñas sobre una distancia de 20 metros de su sitio original, causando cambios en la región del epicentro.
Las placas tectónicas, sobre las que reposan los ocíéanos y los continentes están situadas sobre el magma, que roca derretida a grandes profundidades del manto terrestre, desconocidos para la ciencia, por lo que los geólogos y sismólogos sólo pueden establecer cálculos de probabilidad para prevenir, pero nada puede impedir.