VíCTOR COLMENAREJO
Los Lakers no disputaban un partido de segunda ronda de playoffs desde la primavera del 2004, última temporada de Shaquile O'Neal en Los íngeles. Tres cursos hicieron falta para darse cuenta de que con Kobe haciendo de superhíéroe no daba para retos mayores. Y llegó Gasol, y volvieron a ganar una eliminatoria. Los Lakers juegan bien, sí, pero además tienen hambre, probablemente, más que ningún equipo de la conferencia.