La empresa operadora de parques de diversión Six Flags anunció ayer que se acogió a las leyes de bancarrota de Estados Unido, con el objeto de reestructurarse y deshacerse de una deuda por mil 800 millones de dólares.
La firma aclaró en un comunicado de prensa que su decisión no afectará la operaciones de sus 20 parques ubicados en Estados Unidos, Canadá y Míéxico.
El director de la empresa, Mark Shapiro, señaló que la administración actual heredó una deuda de dos mil 400 millones de dólares que es insostenible dado el estado actual de la economía. De esa deuda total, se espera eliminar mil 800 millones de dólares, dentro del plan de reestructuración.
“Como resultado, estamos limpiando el pasado y situando a la compañía para el crecimiento futuroâ€, dijo Shapiro.
El ejecutivo tambiíén explicó que 2008 fue para la empresa un año ríécord para sus operaciones, y que la bancarrota sólo tiene la intención de limpiar sus balances y completar su reestructura.
