Telefónica es una compañía integrada, lo que significa que ofrece telefonía fija y móvil a sus clientes. Pero no es así en todas partes. La compra de las filiales de Bellsouth le permitió entrar en nuevos países de Latinoamíérica, aunque sólo con el negocio celular. Ahora está poniendo remedio, con el lanzamiento de telefonía fija con una tecnología especial en cinco países.
Latinoamíérica ha superado a España y se ha convertido en la región de Telefónica que más aporta a los ingresos; su contribución al crecimiento del grupo es vital frente a las menores posibilidades de mejora de mercados más maduros como los europeos, y se ha convertido en una aliada inestimable para capear la crisis mundial. Por eso, Telefónica no pierde ninguna oportunidad de reforzarse al otro lado del Atlántico. Y ahora que su presencia se extiende a la práctica totalidad de los países y que las adquisiciones son más limitadas, ha fijado su mirada en la tecnología para seguir creciendo un poco más.
Y es que Telefónica cubre la mayoría de Latinoamíérica, pero no da todos los servicios a los clientes. En las naciones donde entró en la díécada de los 90, lo hizo acudiendo a las privatizaciones y compró compañías que daban tanto telefonía fija como móvil. Pero en otra ronda de crecimiento entró en Míéxico y lo hizo sólo con telefonía celular. La compra de las filiales de la estadounidense Bellsouth en 2004 fue un paso de gigante, pero tambiíén en exclusiva en el terreno del móvil.
El resultado es que Telefónica está en 14 países en Latinoamíérica y sólo en siete de ellos tiene una operativa extensa y tradicional en telefonía fija. Además, en algunos ni siquiera la cobertura es nacional.
Pero Telefónica ha encontrado una solución a esta circunstancia, que le ha permitido lanzar telefonía fija en cinco países de Latinoamíérica donde no tiene red tradicional y ampliar en otros cuatro su cobertura.
La respuesta ha sido una tecnología llamada fixed wireless -la traducción literal sería móvil fijo-, que permite conectar un telíéfono fijo a la red celular y dar telefonía tradicional a los clientes a travíés de esa infraestructura sin que el abonado note ninguna diferencia. Los precios y las condiciones son los de la telefonía fija -más barata que la móvil-, porque el terminal se conecta de forma fija con la celda de la red celular que está más cerca del hogar del cliente. Eso sí, se renuncia a la movilidad.
Las ventajas de esta tecnología es que no requiere el despliegue de una red fija, mucho más costosa que la celular y que Telefónica no tiene en muchos países de Latinoamíérica. Lo que sí tiene es la infraestructura móvil, así que puede lanzar servicios de fijo en cualquier momento, conectar clientes sin ninguna inversión adicional y competir así con la operadora dominante en telefonía fija del país en cuestión. Es más, las redes de fijo no suelen ser nacionales en Latinoamíérica, sino que cubren sólo las partes más pobladas de los países. La red celular es más extensa, así que Telefónica puede llegar con esta tecnología a zonas donde el operador dominante no accede con su red.
Telefónica lleva años usando esta tecnología en Argentina, para dar servicio en las zonas donde no llega su red de telefonía fija. Pero su apuesta en este caso ha sido limitada. El verdadero salto lo dio con el lanzamiento de los servicios en Venezuela y, según reconocen en la compañía, ni siquiera fue un proyecto propio. Cuando Telefónica compró el operador celular venezolano, encontró entre los planes de Bellsouth una iniciativa diseñada para entrar en telefonía fija con fixed wireless. La española decidió seguir con ella y el resultado fue mucho mejor del esperado. Telefónica tiene 1,3 millones de clientes de fijo en Venezuela y algunos meses ha llegado a captar el 20% de las altas.
Con esta experiencia en la mano, Telefónica pisó el acelerador y lanzó servicios durante 2008 en Ecuador, Míéxico, Guatemala, El Salvador y Nicaragua. Tambiíén tiene más de medio millón en Perú, donde completa así su oferta de telefonía fija. El último movimiento fue hace unos días, cuando inauguró el servicio en Panamá. En total, Telefónica tiene casi 2,5 millones de clientes en esta tecnología y ha conseguido aumentar su cobertura de telefonía fija de siete a 12 países en Latinoamíérica.
Colombia y Brasil siguen a la espera de decisión
Con sus últimos lanzamientos en telefonía fija, Telefónica sólo está a falta de Uruguay para dar cobertura tradicional en todos los países donde está en Latinoamíérica. Pero hay dos naciones en las que todavía está pendiente la decisión de entrar con fixed wireless. Se trata de Colombia y Brasil, donde Telefónica tiene red de telefonía fija, pero le quedan territorios por cubrir, porque la licencia no es nacional.
Otra ventaja que tiene esta tecnología sobre la telefonía fija, es que en muchos países de Latinoamíérica lograr una conexión puede tardar meses. La oferta de Telefónica, en cambio, es inmediata; el cliente puede comprarla en tiendas e instalarla íél mismo. Eso sí, la parte negativa es que la calidad de la llamada es de móvil, algo inferior, y que la implementación de la banda ancha va más retrasada.
Banda ancha
El próximo paso es que se pueda dar banda ancha con la tecnología fixed wireless, lo que permitiría a Telefónica convertirse en un competidor de igual a igual con cualquier operador con red fija en los países donde ella no tiene esta infraestructura.