Reuters
Nueva York.- Un juez estadounidense ha aprobado la venta por bancarrota de General Motors, una decisión que permitirá que los activos más rentables de la compañía salgan de la protección de la ley de quiebras bajo control del Gobierno.
El juez Robert Gerber, en cargo del caso, ha afirmado que la venta "evitará la muerte del paciente en la mesa de operaciones".
GM, que se acogió a la protección por quiebra el 1 de junio, había sostenido que se vería obligada a liquidar su negocio si la venta no era aprobada. El Gobierno estadounidense dijo que no podría retirar su financiación para la automovilística si el acuerdo no era aprobado para el 10 de julio.
"Si GM procede con una liquidación, no habrá nada no sólo para los accionistas; tampoco habrá nada para los acreedores no asegurados", dijo el juez Gerber en la argumentación de su fallo, de 95 páginas.
Bajo el acuerdo, la nueva GM operará las mejores divisiones de la compañía antigua, incluyendo sus marcas Chevrolet y Cadillac, con una fuerza laboral más barata, una red de concesionarias más reducida y mucha menos deuda.
La 'vieja GM', que incluye marcas poco populares y fábricas y pasivos no deseados, seguirá en la corte de bancarrota para ser liquidada.
La aprobación de la venta marca la segunda gran victoria para el Gobierno en la industria automotriz, que el mes pasado ayudó a negociar la venta de Chrysler un grupo liderado por la italiana Fiat.
El Tesoro de Estados Unidos acordó destinar 60.000 millones de dólares para financiar la nueva compañía, incluyendo unos 50.000 millones de dólares que darán al Tesoro una participación de un 60% en la compañía.