Varios miles de fieles peregrinaban ayer frente a la imagen de San Cayetano, patrono del trabajo, para rogar por empleo y prosperidad en coincidencia con un fuerte mensaje del papa Benedicto XVI referido a la situación social en Argentina.
El Papa alentó a “reducir el escándalo de la pobreza y la inequidad social†en Argentina, con motivo de la colecta “Más por Menosâ€, que se realiza cada año en el país. El mensaje fue difundido en la víspera por la Conferencia Episcopal Argentina y tomó por sorpresa al gobierno de Cristina Fernández.
Crece la pobreza Cuando la economía ha frenado su marcha luego de seis años consecutivos de crecimiento, lo que ya se percibe en los índices de pobreza y desempleo, una multitud cumplió con la peregrinación que cada 7 de agosto se realiza a San Cayetano, en el barrio Liniers de esta capital, este año bajo el lema “buscamos justicia, pan y trabajoâ€.
“El lema surgió de los mismos fieles que acuden al santuario. La gente está muy necesitada, con miedo. Necesita sentirse más segura en el sentido de poder tener trabajo digno y que todos tengan y no solamente algunosâ€, explicó Marcelo Campesi, vicario parroquial de San Cayetano.
Gaetano de Thiene nació en Vicenza, Italia, en octubre de 1480 en el seno de una familia de nobles. Tomo los hábitos a los 36 años para dedicar su vida a los pobres y sufridos. Murió el 7 de agosto de 1547 y esperó más de un siglo hasta que fue santificado como San Cayetano.
Las bajas temperaturas del invierno sudamericano y el temor a la gripe porcina no ahuyentaron a muchos hombres y mujeres de distintas edades, entre los que se cuentan desempleados, obreros y jubilados, que acamparon días antes en los alrededores del santuario para ser los primeros en tocar la imagen del santo y levantar espigas de trigo en señal de agradecimiento por lo que se tiene o para pedir por lo que falta.
“El sacrificio vale la pena. Yo agradezco a Dios tener trabajo. La cosa está muy difícil y uno se aferra a todo para mantener lo que tieneâ€, cuenta Marcelino, de 45 años, sentado en una banca de madera junto a su familia en la hilera de fieles que se extiende varias cuadras.
Un brasero improvisado de lata ayuda al hombre a espantar el frío mientras aguarda el ingreso a la iglesia.
Los primeros signos de retracción económica y aceleración del proceso inflacionario ya evidentes a fines de 2007, pero que se profundizaron al año siguiente, castigaron especialmente a los sectores de bajos recursos y amplió la brecha con los más adinerados. Según cifras oficiales, en el primer trimestre de 2009 el índice de desocupación afectó al 8.4% de la población de 37 millones contra el 7.3% del último trimeste es un escándalo en nuestro país, con las condiciones que tieneâ€, afirmó el jefe de gabinete de ministros, Aníbal Fernández, quien de todas formas indicó que el mensaje del Papa no esconde una crítica y que utilizó tíérminos similares para referirse a otros países.
Advertencia de la Iglesia El cardenal primado de Argentina, Jorge Bergoglio, advirtió que se viven “situaciones de pobreza escandalosaâ€, un día despuíés que Benedicto XVI hablara del “escándalo†de la desigualdad social en este país.
“Es una injusticia que en nuestra patria bendita a tantos les falte el trabajo y el pan, no puede serâ€, remarcó el tambiíén arzobispo de Buenos Aires al encabezar la multitudinaria celebración del día de San Cayetano, patrono del pan y el trabajo.
Monseñor Bergoglio ofició la misa central frente a la parroquia de San Cayetano, donde se concentraron miles de personas, muchas de ellas acampadas desde hace días frente al templo.
“Vivimos situaciones de pobreza escandalosa, de falta de trabajo o estas enfermedades que nos afectan masivamente, la gripe (A, que según cálculos oficiales ha causado 337 muertos en el país), el dengue, y que pegan más duro por la falta de justiciaâ€, manifestó el cardenal.
Bergoglio prácticamente parafraseó al Papa, quien la víspera instó a los argentinos a realizar “un esfuerzo solidario†que permita reducir “el escándalo†de la iniquidad social y la pobreza.
El Pontífice hizo el llamado en un mensaje que envió a la Comisión Episcopal de Ayuda a las Regiones Más Necesitadas.
“Cuánta gente, cada día más, duerme en la calle, en plena Plaza de Mayo, pleno corazón de esta ciudad, pero para este mundo cruel, que no mira los rostros, son material para descartarâ€.
