Efe
Madrid.- La crisis económica, con un paro que afecta a cuatro millones de personas y, en consecuencia, una importante caída de la demanda va a dejar el consumo en niveles históricos.
Así, según un informe de Caixa Catalunya, la economía española podría cerrar este año con el mayor desplome del consumo privado, de hasta el 4,1%, una contracción que afectará a todas las comunidades autónomas, de manera más acusada a Canarias, Cantabria, Navarra y Extremadura.
Diecisíéis años despuíés del último indicador negativo del consumo privado en España, el -2,3% de 1993, Caixa Catalunya anticipa para 2009 un decrecimiento de esta tasa del 4,1%, en sintonía con el descenso del 5% que pronostica para el gasto per cápita.
La entidad ha revisado "drásticamente" a la baja sus previsiones sobre las expectativas de crecimiento del consumo privado para 2009, de manera que ha pasado del 0,2% de aumento que esperaba el pasado mes de octubre al descenso del 4,1% que postula ahora.
Un cambio de ciclo que aprecia especialmente en el caso de Canarias, donde espera un retroceso del 6% del consumo privado, cuando en el año 2003 esa comunidad lideraba con el 4,5% un crecimiento que entonces era el contexto en el que se movían todas las autonomías.
Llamativas son tambiíén las caídas en Cantabria (-5,1%), Extremadura y Navarra (-5%).
Por encima de la bajada media nacional estarán este año Aragón, el País Vasco y La Rioja, con desplomes del 4,5% en las tres, así como Andalucía y Cataluña, con contracciones del 4,3% en ambos casos.
Entre las regiones que registrarán un descenso inferior al promedio pero cercano a la media se sitúan Madrid, con un retroceso del 3,9%, y Murcia y la Comunidad Valenciana, con el 3,8%.
Significativamente más alejadas están Baleares, con un descenso del 3,4%; Asturias y Galicia, del 3,3% en los dos casos, y Castilla-La Mancha, del 3%.
Cifras negativas en todos los casos, cuando en 2008 sólo siete de las diecisiete comunidades autónomas cerraron el año con bajadas de su consumo privado y el conjunto del país acabó con una tasa positiva de crecimiento del 0,1%.
Según el informe, las causas de este desplome en el consumo son el crecimiento moderado del número de hogares, la destrucción de empleo, el deterioro adicional de la confianza de las familias, los elevados niveles de endeudamiento y la píérdida de valor de la riqueza inmobiliaria.
Factores compensados parcialmente por la caída de precios al consumo, la bajada de los tipos de interíés y cierta recuperación de la riqueza financiera.