El Gobierno de Estados Unidos pondrá fin el lunes al popular programa Dinero por Chatarra, que contó con fondos por 3 mil millones de dólares, dándole a los clientes unos días más para aprovechar los incentivos gubernamentales en la adquisición de un vehículo nuevo.
Dicho programa impulsó las deprimidas ventas de autos en Estados Unidos, y el empujón llegó hasta esta ciudad provocando que maquiladoras del sector autopartes recuperaran cierto nivel de producción.
Según Soledad Máynez, presidenta de la Asociación de Maquiladoras, el primer fondo asignado a Dinero por Chatarra (mil millones de dólares) hizo que los pedidos en el sector maquilador de autopartes creciera un 17%.
Los otros dos mil millones de dólares asignados al programa por Estados Unidos hace dos semanas harían que la producción en dichas plantas se elevara otro 30 ó 35 por ciento, según declaró.
El Departamento de Transporte informó el jueves que el Gobierno pondrá fin al programa el lunes a las 8 de la noche. Los compradores de automóviles pueden recibir bonificaciones de 3 mil 500 ó 4 mil 500 dólares al canjear sus vehículos viejos por modelos nuevos, más eficientes en el consumo de combustible. “Ha sido muy emocionante formar parte de la mejor noticia económica en Estados Unidos’’, dijo el secretario Ray LaHood en un comunicado. “Ahora estamos trabajando para poner fin en forma ordenada a este programa tan popular’’.
Hasta el jueves, los distribuidores de automóviles habían hecho ventas por 1 mil 900 millones de dólares, y están encaminados para agotar los fondos de 3 mil millones de dólares del programa a principios de septiembre. Los incentivos han generado la venta de más de 457 mil vehículos.
Funcionarios del Gobierno dijeron que han revisado casi el 40% de las transacciones y han pagado ya 145 millones de dólares a los distribuidores. No hay planes de buscar financiación adicional, señalaron las fuentes del Gobierno.
Las autoridades dijeron que no serán aceptadas las solicitudes para más bonificaciones despuíés del plazo del lunes, y los distribuidores ya no deben hacer más ventas sin antes recibir todos los papeles necesarios de parte de sus clientes.
Los concesionarios podrán volver a presentar las solicitudes rechazadas despuíés del plazo.
En una entrevista, Obama dijo el jueves que el íéxito del programa ‘’ha rebasado lo que imaginábamos todos’’, pero los concesionarios fueron abrumados por la respuesta de los consumidores. Prometió que los distribuidores “obtendrán su dinero’’.
(Con información de Associated Press)