Con el sugerente título de 'Atrapados por el roaming', un informe de Facua muestra que Movistar cobra a sus clientes españoles más del triple que su filial O2 a los británicos por conectarse a Internet desde otros países de la Unión Europea.
La operadora española no es la única en 'diferenciar' a sus clientes nacionales de los de sus filiales en el extranjero. La matriz francesa de Orange tambiíén trata peor a sus clientes en el país galo que sus filiales en España y el Reino Unido.
La británica Vodafone, en cambio, aplica una tarifa mucho menos cara a sus usuarios del Reino Unido que a los de sus compañías en España, Francia e Italia.
Para llegar a estas conclusiones, la asociación ha analizado las tarifas de acceso a la Red que aplican a sus clientes cuando viajan a otros países 13 compañías de móvil de España, Francia, Italia y Reino Unido (PDF).
Los precios más caros que las compañías aplican por defecto por cada Mb cuando se navega en 'roaming' dentro de la UE son los 11,60 euros de Movistar España, los 9,22 de Orange Francia y los 9,01 de Vodafone Italia. En países no comunitarios y de otros continentes, las tarifas son generalmente mucho más elevadas.
Facua-Consumidores en Acción alerta una vez más de las facturas de pesadilla, de cientos o miles de euros, que pueden recibir los turistas cuando regresen de sus vacaciones en el extranjero si han navegado por Internet con sus compañías de móvil. Así, recuerda que ha habido casos de facturas 'sorpresa' que han llegado en algún caso hasta los 10.800 euros.
Por eso, pide que el acceso a Internet en 'roaming' en la UE tenga un precio regulado como las llamadas y los SMS.
En una nota, Facua recuerda que para lograr la anulación de las facturas o la devolución de las cantidades cobradas, es conveniente argumentar que los afectados no fueron informados por sus compañías de las tarifas que les aplicarían por navegar por Internet en el extranjero.
Desde el 1 de julio un Reglamento europeo obliga a las compañías a notificar los precios a sus clientes en el momento en que se conecten en cualquier país de la UE.