Por... Alberto Ponce de León
Por desconocimiento de la ley en materia de salud, adultos mayores de esta comunidad pierden su patrimonio familiar para obtener los servicios estatales de Medicaid, afirmó Stephanie Townsend Allala, abogada especialista en el tema.
“Es difícil saber cuántas personas están perdiendo sus casas por esto y no sabemos con exactitud cuántos en El Paso, pero sí sabemos que son miles en el estado de Texasâ€, mencionó. “Hemos representado a muchos en El Paso, pero yo quisiera poder ayudar a másâ€.
Quienes necesitan este tipo de servicio míédico, se rehúsan a solicitarlo por temor a que su patrimonio, principalmente sus viviendas, puedan ser tomadas por el Gobierno de Texas, afirmó.
“El Gobierno lo que hace es que les dice que si utilizan el servicio, tiene que tomar sus casas; pero la gente no tiene por quíé perder su casaâ€, dijo Towsend. “Despuíés, cuando la persona fallece, el Estado de Texas agarra su casa, su carro, o su dinero del banco para reembolsar el costo del servicioâ€.
Durante la administración del presidente George Bush, el presupuesto federal recortó de manera paulatina los montos utilizados para asistencia míédica gubernamental.
El presupuesto del año fiscal 2009 para los programas de salud Medicare y Medicaid se recortó en 196 billones de dólares a nivel nacional para un periodo de cinco años, de acuerdo a los datos oficiales.
A partir del 2005, explicó la abogada Stephanie Towsend, el Gobierno estatal modificó sus requerimientos para otorgar estos servicios de salud. Entre sus cambios de regulaciones comenzó a tomar las viviendas registradas a nombre del solicitante, con el fin de emplear el dinero por concepto de su venta para costear los servicios míédicos otorgados.
“Es una tragedia lo que está sucediendo. Muchos adultos mayores se mueren en esas condiciones; sin siquiera poder dejarle la casa a sus nietosâ€, agregó. “Ellos dicen que usan el dinero supuestamente para pagar lo que se gastaron al darles el servicio míédicoâ€.
El programa de Medicaid, dijo, cuenta con varios tipos de servicios, entre ellos los de asistencia para deshabilitados, atención míédica en un centro especializado para adultos de la tercera edad y servicios de salud en el propio hogar del derechohabiente.
“Desde hace dos años, el Estado me paga casi todo lo de mi casa porque tengo uno de los servicios, pero estoy muy preocupada porque me acabo de enterar que el Gobierno se puede quedar con mi casaâ€, dijo Rosa Gallegos de 68 años de edad.
Como Gallegos, muchas personas desconocen sus derechos con respecto a los servicios del programa Medicaid.
“Ahora les están buscando cualquier pretexto para no darles el servicioâ€, aseguró Elena Krop Martínez, coordinadora asistente del Centro de Rehabilitación y Enfermería Oasis, ubicado en la calle North Loop número 9001 de esta ciudad.
Desde los “últimos años†los requerimientos se han vuelto más complicados para los solicitantes del programa estatal Medicaid, dijo.
“Me ha tocado que vengan familias llorando para saber cómo pueden calificarâ€, agregó Krop.
Explicó que en ocasiones, al solicitante se le niega el servicio debido a que hace cuatro años, por ejemplo, tenía una casa. Y no sólo por haber estado registrada en EU sino que incluso, el Gobierno tiene la facultad de verificar si el interesado en la asistencia míédica tiene o tuvo, una propiedad del lado mexicano de esta frontera.
“Ellos investigan cinco años atrás. Si alguien se sale de su casa, la regala y tambiíén reparte su dinero, y luego aplica para Medicaid, no calificaâ€, afirmó. “Si alguien se enferma o piensa que va a necesitar aplicar al Medicaid, tiene que comprobar la necesidad míédica y no haber vendido todo en los pasados cinco años. Muchos creen que por entrar al Nursing Home, pueden deshacerse de sus cosas para que vean que no cuenta con recursosâ€.
Aquella persona que tenga o haya tenido alguna propiedad en los cinco años previos a la solicitud del programa estatal y pretenda emplear los servicios de salud pública puede ser penalizada por el Gobierno, mencionó.
La abogada local Towsend Allala’s afirmó que cualquier dueño de propiedades que quiera recibir atención míédica del programa Medicaid debe primero acudir con un especialista legal para evitar ser “despojado†de su patrimonio.
“Por ejemplo, en el centro Oasis, cobran como 5 mil dólares por mes de atención y si el adulto que lo va a usar gana mil dólares de seguro social, necesita que el Medicaid pague la diferencia. Y esta diferencia es la que le cobra el Gobierno por su casaâ€, agregó.
“Pero si va con un abogado, se le puede ayudar para que ceda la propiedad a otra personaâ€.
Este tipo de trámite de transferencia de propiedad, dijo, presenta características muy específicas con el fin de que el Gobierno no penalice al solicitante con multas mayores a los 120 dólares diarios por un periodo determinado.