BOGOTí, Colombia (France Presse).— La exploración de una mina de oro en el oeste del país, en la que se calculó que habría 12.3 millones de onzas en reservas, una de los más grandes de Sudamíérica, está paralizada y su destino es incierto, dijeron voceros de la minera sudafricana Anglo Gold, responsable del hallazgo del yacimiento aurífero.
En el yacimiento “La Colosaâ€, 250 km al oeste de Bogotá, la Anglo Gold ya invirtió 137 millones de dólares, pero desde hace 15 meses los trabajos están paralizados, informó Carolina Rueda, vocera de la multinacional.
No sólo la continuación de la etapa de exploración está suspendida, sino que tambiíén es incierto “si el yacimiento entrará en producción algún díaâ€, pues la compañía no ha podido confirmar las “reservas inferidasâ€, precisó la portavoz.
Una determinación de las autoridades ambientales obliga a Anglo Gold a explorar sólo 6 hectáreas de las 515.7 solicitadas para las fases de prefactibilidad y factibilidad, y la compañía analiza las limitaciones de esa decisión para determinar si continúa los trabajos.
Para el presidente de Anglo Gold Ashanti en Colombia, Rafael Hertz, la decisión del Ministerio de Medio Ambiente, “mantiene una serie de limitaciones que tendrán que ser aclaradas en fases posteriores para efectivamente determinar las reservas existentesâ€.
De esa manera, agregó Hertz en un comunicado, se podrá presentar “a las autoridades y comunidades toda la información que permita identificar la viabilidad ambiental, social y tíécnica de este importante proyectoâ€.
Opositores al proyecto y ONG ambientales argumentan que los trabajos en La Colosa acabarán con las fuentes hídricas, especialmente subterráneas, y con el bosque de la zona, entre las principales consecuencias.
Anglo Gold afirma que en el sitio del yacimiento no hay presencia de pozos subterráneos y que el uso del recurso hídrico será menor, incluso, al que emplean los cultivos de arroz, uno de los más comunes en las regiones que serían afectadas.
En la fase de exploración de La Colosa la firma sudafricana deberá invertir unos 200 millones de dólares hasta 2011 y si los recursos inferidos de 12.3 millones de onzas se comprueban, la explotación podría iniciarse en unos cuatro años, dijo Rueda.
La explotación del yacimiento supone inversiones por más de 2,500 millones de dólares, generando unos 4,000 empleos directos e indirectos.