La ilusión tira y afloja las riendas de las bolsas
Publicado por Carmen Ramos
El Ibex 35 ha cerrado la primera semana de septiembre con un descenso del 1,92%, para situarse en los 11.222 puntos. Un dato que, como suele ocurrir, dice bien poco de lo que ha acontecido en estos días. Han sido jornadas intensas, en las que los principales organismos monetarios han alimentado la ilusión de los alcistas y la recogida de beneficios ha azuzado la de los bajistas.
La verdad es que agosto ha sorprendido a propios y extraños, ya que tras cinco meses de subidas y un mes de julio rompedor, el mejor de la historia del indicador, no se esperaba que los índices consolidaran los avances anteriores y subieran casi otro 5%.
Todo el mundo apostaba porque los dos principales bancos centrales, la Reserva Federal de EEUU y el Banco Central Europeo, mantendrían los tipos de interíés en los niveles actuales, pero no se barajaba que, precisamente en el parón estival, anunciarían una mejorara sustancial del trasfondo económico. Los presidentes de ambas entidades , y de manera más explícita Bernanke, han afirmado que la actividad económica se está estabilizando.
Es decir, ya no se habla de que haya cedido el ritmo de deterioro, sino de que ha tocado fondo. Una percepción que esta semana han apuntalado el propio BCE, el FMI y la OCDE al mejorar las previsiones de crecimiento de las economías.
Además, y por si alguien tenía alguna duda, a mediados de agosto el presidente Obama confirmaba a Bernanke como presidente de la Fed por cuatro años más. Un anuncio que se ha efectuado cinco meses antes de que expirara su mandato y que supone un mensaje de confianza.
En esta mejora del trasfondo económico y en la percepción de que se está en el camino adecuado se basa la ilusión de los alcistas, de manera que el dinero está volviendo a las bolsas. Sin embargo, en el otro extremo de la cuerda, los bajistas y un gran número de inversores prudentes que esperan con ilusión una corrección.
Unos no terminan de creerse que los mínimos de marzo son historia y siguen fuera del mercado; otros, han entrado y salido más de una vez, y ahora esperan que se corrijan los excesos estivales. Todos tirarán de la cuerda y se darán pasos adelante y atrás, pero todo invita a pensar que el fondo del mercado es alcista.