La amenaza bajista de la semana pasada ha sido cancelada. El Ibex cerró ayer en 11.388,6 puntos tras recuperar un 1,48%, y los analistas tíécnicos reafirman que su meta de medio plazo son los 12.500. El potencial de subida se sitúa en el 10%.
Todos los intentos de corrección de las últimas semanas han sido anulados sin mayores esfuerzos. El primero, de sólo dos días de duración, tuvo lugar a mediados de agosto. El segundo empezó el pasado lunes y terminó el miíércoles: la subida del 3,5% en las tres últimas sesiones así lo confirma. El Ibex ni siquiera se aproximó a su soporte de los 10.500 puntos.
La fortaleza de la tendencia alcista de medio plazo es incuestionable, a juicio de los expertos consultados. "Confirmamos que el objetivo son los 12.500 puntos, aunque la fuerte sobrecompra obliga a seguir de cerca posibles pautas de giro", explica Carlos Jaureguízar, director de Noesis. Alcanzar dicho nivel supondría recuperar el 61,8% de la caída desde el ríécord histórico de noviembre de 2007 hasta los mínimos del pasado marzo.
Antes de poner rumbo definitivo hacia ese objetivo, tendría que enfrentarse a la barrera de los 11.450 puntos, la resistencia que se creó con la caída del pasado 1 septiembre.
"La tendencia alcista de medio plazo se mantiene intacta, lo que no quiere decir que las subidas estíén aseguradas. Nos encontramos en una situación extremadamente complicada. Si se está fuera, no recomiendo adentrarse ahora; los movimientos son demasiado bruscos y se puede perder un 10% en unos días.", señala Josíé Luis Cárpatos, de Serenitymarkets.com.
La mayor parte de los expertos aconseja esperar una corrección antes de tomar posiciones; entre ellos, Teun Draaisma, estratega estrella de Morgan Stanley, que en un informe publicado ayer afirma que el rally alcista no está cerrado: "Un ciclo de crecimiento está comenzando, por lo que aconsejamos comprar en momentos de debilidad".
Pero la presión bajista no ha logrado todavía hincarle el diente a la renta variable de forma medianamente contundente. El director de Noesis indica que la píérdida del entorno de los 10.900 puntos daría una primera señal de debilidad. En todo caso, los 10.500 puntos continúan siendo la referencia de medio plazo: su píérdida confirmaría casi definitivamente el final del tramo alcista.
El experto de Serenitymarkets.com da otra pista para detectar una caída de mayor intensidad. "Los 5.170 puntos del Dax, uno de los índices más fiables para conocer la solidez de la tendencia, son fundamentales. Si los perfora, nos avisaría de que las órdenes de venta tienen vía libre para un ataque más serio", afirma. Con todo, su escenario más probable es el de una tendencia lateral con tintes alcistas, similar a la desarrollada por el Dow tras la crisis del 29. De momento, los movimientos son muy similares a los del Nasdaq (víéase gráfico).
Pendientes de EE UU
Wall Street no abrió ayer sus puertas debido a la celebración del Día del Trabajo, pero los expertos siguen muy de cerca la evolución de sus índices. "El S&P 500 se ha movido desde mediados de agosto entre los 890 y los 1.040 puntos. Si perfora la banda inferior, hay margen para que baje hasta los 780. Por el contrario, si supera el nivel superior, previsiblemente se aproximará a los 1.120", indica Eduardo Faus, de Renta 4. Este último escenario coincidiría con el objetivo del Ibex en los 12.500 puntos.
Ayer, el selectivo español encadenó su tercera sesión consecutiva de subidas, acercándose a los 11.400 puntos. Cerró en 11.388,60 tras sumar un 1,48%, en línea con sus colegas del Viejo Continente (el Dax sumó un 1,47% y el Cac, un 1,5%). Eso sí, el volumen sigue bajo mínimos: ayer se movieron 1.778,5 millones de euros, por debajo de la ya disminuida media diaria de agosto, de 2.646 millones.
Telefónica tira de la Bolsa con una subida del 2,07%
El principal motor de la subida de ayer de la Bolsa española fue Telefónica, cuyo acuerdo con China Unicom ha recibido el aplauso de analistas e inversores. Ayer se anotó un 2,07% y contribuyó con 50 puntos a los 166 que se anotó el Ibex en el día.
Luis Padrón, de BNP Paribas Fortis, señala que es la continuidad de una alianza positiva, aunque indica que el día del inversor, que celebrará el próximo 9 de octubre, será más importante para su evolución en Bolsa. Igualmente, David Cabeza, de Caja Madrid Bolsa, cree que la alianza va en la buena dirección, pero afirma que su impacto en valoración es reducido. Iván Sanfíélix, de Renta 4, destaca el hecho de que ambas compañías compartirán inversiones en infraestructuras.
Por su parte, JPMorgan asegura que, en caso de ampliar capital para dar entrada a la teleco china, la dilución de su beneficio por acción sería sólo de un 0,5%.