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Autor Tema: Santander, Barclays, BBVA y Caja Madrid, los mayores acreedores de Reyal-Urbis  (Leído 761 veces)

Eguzki

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La banca española e internacional se juega mucho en Reyal-Urbis. Se juega casi 5.000 millones de euros en total, repartidos entre 49 entidades diferentes. En especial, hay cuatro con una exposición cercana o superior a los 400 millones de euros cada una: Santander (principal acreedor de la histórica inmobiliaria de Banesto), Barclays, BBVA y Caja Madrid.

Estas enormes cantidades, que tendrí­an que provisionar en caso de concurso, son las que explican el interíés de los bancos por salvar a Reyal-Urbis aunque tengan que ponerse a la cola para cobrar por detrás de los acreedores no financieros.

Según los datos a los que ha tenido acceso El Confidencial, la deuda de la empresa presidida por Rafael Santamarí­a con Santander alcanza los 450 millones, mientras que a Barclays debe algo más de 400 millones, y a BBVA y Caja Madrid, una cantidad ligeramente inferior a íésa. Por detrás de este grupo, aparecen dos entidades con una exposición a la inmobiliaria superior a los 250 millones: Royal Bank of Scotland y Popular.

Esta deuda era mucho mayor hace unos meses, pero se ha reducido notablemente despuíés de que varias de estas entidades hayan adquirido inmuebles de Reyal-Urbis en dación en pago por cantidades importantí­simas. Según fuentes conocedoras de la situación, Santander se ha quedado con inmuebles por unos 1.400 millones, mientras que BBVA, Popular y Caja Madrid han adquirido unos 100 millones de euros cada uno.

En la lista de acreedores aparecen tambiíén, con más de 200 millones de deuda cada uno, Sabadell, Bancaja y el mismí­simo ICO (Instituto de Críédito Oficial). La entidad pública participó en el sindicato para el príéstamo de 3.400 millones con el que Reyal adquirió Urbis en 2006, una operativa -financiar grandes adquisiciones empresariales- que ya habí­a puesto en marcha cuando financió a Acciona para entrar en Endesa.

Con cantidades que se sitúan entre los 100 y los 200 millones aparecen el japoníés Shinsei, La Caixa, Eurohypo, Unicaja, Caixa Geral, Banesto, Caixa Galicia y el antiguo Hypovereinsbank (hoy integrado dentro del italiano Unicredit). Por detrás encontramos otro grupo de entidades con un riesgo superior a 50 millones: Banco de Valencia, CAM, Cajastur, ING e Ibercaja.

Completan la lista de 49 entidades, con deudas inferiores a 50 millones cada una, la intervenida Caja Castilla-La Mancha, Rabobank, Pastor, HSBC, Caja Segovia, Caixa Catalunya, Deutsche Bank, Banca March, Caja Canarias, Cajamar, Caja Burgos, Prudential, Caixanova, Cajasur (en proceso de fusión con Unicaja), Caja Badajoz, Caixa Manresa, Cajasol, BBK, Caja ívila, Caja España, Caja Cantabria, Sa Nostra, Caja Cí­rculo, Caixa Sabadell, Caixa Penedí¨s, Banco de Andalucí­a (filial absorbida por el Popular) y Caja Duero.

Un plan para salvar el concurso in extremis

Como informó ayer El Confidencial, este conjunto de entidades ha propuesto a Santamarí­a un plan de salvación que consiste en vender los principales edificios de la inmobiliaria y, con esos ingresos, cancelar la deuda con los acreedores no financieros, principalmente proveedores. Esta deuda asciende a unos 1.300 millones. Una vez liquidado ese problema (si se consiguen vender los edificios, y a un precio suficientemente alto), se tratarí­a de renegociar estos 5.000 millones de deuda bancaria.

Un proceso que tambiíén encontrará grandes obstáculos por la necesidad de poner de acuerdo a tantas entidades con intereses muy distintos, porque ya es la segunda refinanciación y muchos bancos están 'quemados', y porque hay muchas dudas sobre la viabilidad de la inmobiliaria incluso con la refinanciación, porque apenas tendrá capacidad para operar si no puede incurrir en nuevo gasto corriente ni cuenta con los ingresos recurrentes de sus principales edificios.

En los últimos dí­as, la empresa está completando este plan con operaciones como la suspensión de las obras del macroproyecto de La Castellana o la venta, anunciada ayer, del 0,53% de Colonial, con lo que ha ingresado en torno a 1,6 millones de euros.