elmundo.es/J. G.
Madrid.- Un año despuíés de la quiebra de Lehman Brothers los mercados financieros han recuperado una inquietante normalidad. La renta variable de todo el mundo descansa hoy sobre un plácido sentimiento de victoria tras más de siete meses de rally alcista.
Los tipos de interíés en las principales economías del mundo siguen –y así lo harán durante un tiempo- en mínimos historicos que han abierto un cauce de liquidez impensable hace un año. Las materias primas, con el petróleo a la cabeza, esperan en posición de ataque a una definitiva señal de recuperación económica global. Y el cambio actual de las divisas evidencia el fin ¿definitivo? de un largo reinado del dólar.
Pero que los mercados hayan dejado atrás la volatilidad y los peligrosos volantazos de 2008 no es garantía de íéxito para los 'brokers' que operan con instrumentos derivados. Al contrario, ahora sigue siendo igual de importante utilizar la intuición y el conocimiento de todas las variables que influyen en el mercado para mantener la reputación en el negocio. Y el negocio en este caso no tiene nada de distinto que otro cualquiera. Ganar es la única garantía del íéxito.
Desde este lunes y hasta el próximo 6 de noviembre, cualquier inversor, aficionado o profesional, podrá demostrar el conocimiento, la habilidad y el manejo de los derivados a travíés de XTB Trading Cup, un concurso organizado por X Trade Bokers y elmundo.es en el que ganará quien más rendimiento saque a los 20.000 euros virtuales con los que se dispone inicialmente para invertir. Cada concursante podrá invertir a su criterio esa cantidad comprando o vendiendo derivados a tiempo real y con cotizaciones oficiales.
Quien más plusvalías obtenga al final del campeonato ganará un Porsche Cayman, aunque todas las semanas habrá otros premios (PDA) para los mejores traders. El segundo y tercer clasificado del concurso ganarán 5.000 y 3.000 euros, respectivamente. Además, se sorteará un viaje a una ciudad europea para dos personas entre todos los participantes. Motivos suficientes para tomar riesgos e intentar sacarle el máximo partido al mercado de derivados.
Los concursantes podrán invertir en más de 100 activos a travíés del Contrato por Diferencias (CFD), un instrumento derivado que permite tomar posiciones de compra (largas) y de venta (cortas) además de permitir el apalancamiento, es decir, no necesitar invertir el 100% del capital para obtener los máximos rendimientos.
Anticiparse a otros inversores, intuir el signo futuro de las materias primas, divisas e índices y aprender a interpretar los mensajes macroeconómicos y empresariales serán necesarios para acabar conduciendo un Porsche. Además, claro, todos los concursantes podrán arriesgar y jugarse un dinero que no les dolerá perder.