El gobierno de Estados Unidos impuso hoy una multa sin precedentes, de 87 millones de dólares, a la empresa British Petroleum porque no ha corregido sus violaciones de normas de seguridad en una refinería, en Texas, donde una explosión en 2005 mató a 15 personas.
Despuíés de que la Dirección de Salud y Seguridad Laboral (conocida por su sigla en inglíés OSHA) anunció la mayor multa de su historia, fuentes allegadas a la firma indicaron que BP estudiará una apelación.
Hace dos años BP aceptó pagar 50 millones de dólares en multas por omisión criminal en la explosión ocurrida cerca de Texas City en septiembre de 2005. British Petroleum ya ha pagado a OSHA 21,4 millones de dólares en multas de otro tipo, y ha resuelto miles de demandas civiles vinculadas con el estallido.
BP indicó, en un comunicado, su "decepción por las decisiones de OSHA".
"Creemos que nuestros esfuerzos para mejorar la seguridad se cuentan entre los más resueltos y completos que se han visto en la industria de refinerías", añadió la firma.
La disputa se refiere al acuerdo entre BP y OSHA, en septiembre de 2005, por el cual la empresa petrolera se comprometió a erradicar los peligros similares a los que habían causado el estallido en la refinería.
BP cree que ha cumplido con el acuerdo, a pesar de las críticas de OSHA, y ha referido el asunto a la Comisión de Revisión de Salud y Seguridad Laboral, una agencia independiente de OSHA.
OSHA indicó que ha notificado a BP un total de 271 incumplimientos de las normas, con multas que suman 56,9 millones de dólares. Asimismo, según la agencia, se identificaron 439 "violaciones deliberadas" en la gestión de seguridad de procesos, y las multas suman 30,7 millones de dólares.