El número de declarantes del IVA se situó en 2008 en 3,3 millones, 134.499 menos que el ejercicio anterior. Supone el primer descenso en 15 años. La estadística tributaria constata una desaparición sin precedentes de empresas y autónomos, muy por encima (cinco veces más) de los 23.338 contribuyentes perdidos en la crisis de 1993.