La morosidad de los bancos y de las cajas de ahorros en España se elevará a unos 85.000 millones de euros al cierre del ejercicio 2009, según se desprende de estudio de la agencia de recobros Gesif. La crisis económica y financiera ha tenido un fuerte impacto sobre la recuperación de impagados, que se ha vuelto más difícil en el último año y medio, y acarreará un aumento de la morosidad para estas entidades de 3.900 millones de euros hasta que acabe el año.