La entidad financiera holandesa ING Groep registró en el tercer trimestre del año un beneficio neto de 499 millones de euros, o 0,25 cíéntimos por acción, frente a los 478 millones que perdió en el mismo periodo del año anterior, en línea con sus previsiones.
Según informó el banco en un comunicado, el beneficio neto subyacente (que no tiene en cuenta las depreciaciones) en la división de banca ascendió a 264 millones de euros, mientras que en el área de seguros se situó en 514 millones de euros.
"ING logró un sólido resultado comercial en el tercer trimestre, lo que ilustra la fuerza de nuestras divisiones de banca y seguros incluso en este difícil entorno económico", manifestó el consejero delegado de la entidad, Jan Hommen.
Reestructuración en marcha
ING Groep señaló que los buenos resultados se deben, fundamentalmente, a unos mayores ingresos por intereses y a los menores costes. En concreto, el programa de recorte de costes supuso una rebaja en los gastos operativos del 9,3%.
Hommen señaló que confía en cerrar el año habiendo cumplido el objetivo de reducir los costes operativos en 1.300 millones de euros.
En cuanto al plan de reestructuración anunciado a finales del mes pasado, Hommen afirmó que prosigue de forma positiva. En el marco de una reordenación estratíégica emprendida conforme a un acuerdo con la Comisión Europea, ING se dividirá en dos para separar operaciones bancarias y de seguros, y que en los dos próximos años se desprenderá de todas sus actividades en el negocio asegurador.
Según indicó el CEO de la entidad, ya han recibido serias muestras de interíés para adquirir estos activos. "Tendría que usar mis manos y mis pies" para contar todas las compañías que "se han puesto en contacto conmigo", declaró.
Además, ING realizará una ampliación de capital de 7.500 millones de euros y devolverá al Estado holandíés el 50% de las ayudas recibidas por la crisis con el objeto de poder llevar a cabo el plan de reestructuración.
