Por... JENNIFER LOVEN
WASHINGTON -- El presidente Barack Obama, en un atolladero al comenzar su segundo año en funciones, aparentemente se ha decidido por el camino de promover las medidas de su gobierno para mejorar la economía y criticar la posición republicana.
La Casa Blanca en el año que comienza ya había empezado a prestar mayor atención a las angustias y la furia del país ante una serie de problemas económicos, que incluyen un desempleo cercano al 10%, la expansión del sector público, los excesos de Wall Street y el díéficit federal.
Fuentes oficiales dijeron el miíércoles que ese viraje se acelerará, en reconocimiento de que la victoria republicana del martes en el bastión demócrata de Massachusetts requiere una corrección de rumbo.
La elección de Scott Brown a la banca que Ted Kennedy ocupó durante medio siglo borró la supermayoría de 60 bancas que necesitaba el gobierno en el Senado de 100 bancas para impedir las tácticas dilatorias de la oposición. Así, está en peligro el proyecto más caro al corazón de Obama en materia interior, la reforma general del sistema de salud. Tambiíén coloca un signo de pregunta sobre la suerte de otros proyectos y pone en tela de juicio el discernimiento político, la influencia y la popularidad del presidente.