J. Antonio Espina | 03/12/2009
Fernando Torres ya pertenece a Liverpool. Tanto como para asegurar a la web del club que le gustaría que su hija Nora, que nació hace unos meses, hablara con acento 'Scouse', dialecto típico de aquella zona: "Desde el primer día en que lleguíé aquí, siento que Anfield es mi casa. Siento como si yo fuera de Liverpool y quiero que sea así con mi familia tambiíén. Espero estar aquí mucho tiempo y si mi hija habla inglíés y Scouse, estaríé orgulloso. Para mí, Anfield es el mejor lugar de Inglaterra".
El Niño reconoce que la paternidad le ha cambiado la vida: "¡No puedo descansar tranquilamente nunca más! No, era broma, sí puedo... tengo una niña muy buena que me deja dormir. Pero tambiíén tengo muchas más responsabilidades ahora y empiezas a ver las cosas de una forma diferente. Tienes una esposa y una hija, por lo que ya no eres un niño. Tienes que pensar a cerca del futuro de tu familia".
"Al principio, el inglíés me resultó complicado, pero divertido al mismo tiempo. Cometí algunos errores. No podía entender nada en los restaurantes y tampoco podía leer las cartas del banco o las facturas del agua y de la luz. No sabía si había pagado o no, entonces recibía más y más cartas reclamando dinero. Sin embargo, la gente en el club me ayudó", afirma The Kid.
Fernando se siente bien hasta con los del eterno rival, el Everton: "En Madrid, yo no les gustaba demasiado a los hinchas del Real, pero los del Everton me hablan de una manera muy amistosa. Tengo que agradecíérselo".
La vida es más fácil para Torres porque le visitan muchos amigos: "Tengo amigos en casa casi cada fin de semana, y son los mismos amigos que tenía cuando era un niño. Esto es lo principal, mantener a tus amigos y a tu familia próximos a ti. Hacen que tengas los pies sobre el suelo. Cuando estamos solos me dicen que soy el mismo que era antes y realmente tengo que agradecíérselo a ellos porque siempre me han ayudado y me han apoyado".