La ministra de Vivienda, Beatriz Corredor, ha anunciado en el Congreso nuevas medidas para impulsar la venta de casas procedentes del stock. Así, cualquier persona física o jurídica propietaria de un piso podrá solicitar su conversión en vivienda protegida (VPO), una iniciativa destinada hasta ahora sólo al promotor.
La ministra acudió hoy a la Cámara Baja para dar cuenta de los últimos datos sobre el excedente de casas sin vender (relativos a 2008) y para explicar las últimas iniciativas puestas en marcha para fomentar el alquiler. En su comparecencia, recordó que es un clamor que la reactivación del sector inmobiliario y su vuelta a la senda de la actividad pasa por la absorción de las viviendas terminadas y no vendidas, que el Ejecutivo calcula que a finales del pasado año ascendían a 613.512.
Pues bien, para tratar de sacar al mercado esos pisos, bien en venta o en arrendamiento, el ministerio pondrá en marcha distintas actuaciones. Hasta el 31 de diciembre de 2010 podrán ser calificadas como VPO todas las casas de renta libre que cumplan los máximos referentes a superficie, precio por metro cuadrado, plazo mínimo de protección y que dispusieran de licencia de obra emitida antes del 1 de septiembre de 2009.
Rentas medias
Esta medida, destinada en un principio sólo a los promotores, se hará extensiva a cualquier persona física o jurídica que sea propietaria de una vivienda con esas condiciones que no haya logrado vender. Además, se habilita la posibilidad de subrogarse al príéstamo convenido por el promotor a las personas jurídicas, una actuación dirigida a las sociedades de tenencia de pisos o a cualquier otro intermediario. Y finalmente, se plantea la opción de poner en alquiler VPO, destinadas inicialmente a la venta que no han encontrado comprador.
Medida para los inversores
Cuando se debate sobre la existencia de un ingente stock de viviendas sin vender, a menudo se olvida que no todas esas casas están en manos de promotores o entidades financieras. Son muchos los particulares y empresas que al calor de las revalorizaciones de dos dígitos decidieron invertir en el ladrillo. Eran los llamados compradores inversores, aquellos que realizaron las adquisiciones con un componente claramente especulativo. Es a ellos, sobre todo, a quienes va dirigida esta nueva iniciativa, ya que muchas de estas personas físicas o jurídicas están atravesando por serias dificultades como consecuencia de no poder vender esos pisos. La situación se agrava si además esas compras se realizaron con críédito. Cuando un promotor califica sus casas como VPO puede acogerse a las ayudas previstas en el plan de vivienda, que abaratan su príéstamo.
Los particulares y empresas que se endeudaron para comprar casas que ahora quieren vender podrán pasar su príéstamo hipotecario en un críédito subvencionado si destinan la vivienda al alquiler. Los adquirientes de estas nuevas VPO si que tendrán las mismas condiciones hipotecarias que cualquier beneficiario del plan cuatrienal de vivienda.
